Japón tiene en el animé a uno de sus pilares culturales de las más recientes décadas. Incluso, ha llegado a convertirse en elemento clave para la promoción del turismo.
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Pero la visión sobre esto no siempre es positiva.
Estos personajes “moe”, cuyo nombre procede del verbo intransitivo “moeru”, o “brotar”, están causando controversia en el país.
La crítica se enfoca en cómo representan a las mujeres, en el contexto de “moeokoshi”, o “promoción turística regional basada en moe”.
Yasuhito Abe, profesor del Departamento de Medios, Periodismo y Comunicaciones de la Universidad de Doshisha, Japón, realizó un estudio sobre el uso de este tipo de personajes para el impulso turístico.
Puso la lupa sobre la Península de Chita, donde la promoción tiene como personajes a las llamadas “Hijas de Chita”, o “Chita musume”.
Estas son figuras femeninas jóvenes, cada una representando una ciudad o pueblo de la península. La forma de interacción sugerente con los espectadores preocupa al profesor Abe.
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Las críticas del profesor Abe al uso de personajes sexualizados femeninos de animé
“Busqué obtener una comprensión más profunda de las condiciones sociales y culturales bajo las cuales los sectores públicos promueven las prácticas del uso del ‘moe’, en colaboración con los sectores privados dentro del ámbito de la promoción regional”, indicó el académico.
Según su estudio, los personajes “moe” se dirigen a una audiencia predominantemente masculina, perpetuando una forma dañina de representar a las mujeres como objetos sexualizados.
“La práctica de ‘moeokoshi’ puede contribuir a la colonización de cada área a través de la mirada masculina incrustada”, señala Abe, “convirtiendo así los lugares locales en lugares de cita, restringiendo el alcance de la promoción regional a una cuestión de visibilidad para audiencias particulares”.
Abe sugiere la evaluación crítica por parte de los gobiernos locales del uso de los personajes de animé, con el fin de dar forma a otras estrategias de promoción regional.
El estudio del profesor Abe se publicó en la Revista Internacional de Estudios Culturales de Japón.