El Papa Francisco aplaude los avances de la inteligencia artificial, pero advierte que se debe usar éticamente

Tras el lanzamiento de nuevos productos de inteligencia artificial (IA) generativa como ChatGPT y la viralización de una foto del Papa Francisco vistiendo ropa de marca, claramente falsa y generada por una IA, el Sumo Pontífice ha decidido compartir sus pensamientos sobre el desarrollo de esta tecnología.

De acuerdo con un reporte publicado en el sitio web de Neowin, el Papa habló de la inteligencia artificial en una reunión anual de científicos y expertos llamada Minerva Dialogues, en la que dijeron presente ingenieros, líderes empresariales, abogados y representantes de la Iglesia Católica.

El Papa aseguró que aplaude el desarrollo de estas tecnologías porque pueden brindar muchos beneficios, pero también advirtió sobre su uso poco ético o irresponsable.

“Estoy convencido de que el desarrollo de la inteligencia artificial y el aprendizaje automático tiene el potencial de contribuir de manera positiva al futuro de la humanidad; no podemos descartarlo. Al mismo tiempo, estoy seguro de que este potencial solo se realizará si existe un compromiso constante y consistente por parte de quienes desarrollan estas tecnologías para actuar de manera ética y responsable”, destacó.

Preocupación por los algoritmos

Sobre la IA, el Papa Francisco agregó: “Es tranquilizador saber que muchas personas en estos campos están trabajando para garantizar que la tecnología permanezca centrada en el ser humano, éticamente fundamentada y dirigida hacia el bien”.

El Papa también aludió al aumento de la desigualdad que han provocado las tecnologías digitales y preguntó si existía el riesgo de un aumento de la desigualdad a medida que la tecnología se vuelve aún más capaz, dando una mayor ventaja a quienes tienen acceso a ella sobre quienes no.

Además, el Papa se refirió a los algoritmos y advirtió que el valor fundamental de una persona no puede determinarse solo con datos y, por lo tanto, debemos tener cuidado de dejar los juicios sociales y económicos al antojo de algoritmos que simplemente procesan datos sobre el comportamiento anterior.