En 2012, la prensa europea se hizo eco de un desastre artístico: el Ecce Homo de la localidad española de Borja, pintado en 1930 por Elías García Martínez, fue sometido a una restauración… que lo convirtió prácticamente en una caricatura. El trabajo estuvo a cargo de una vecina del lugar, doña Cecilia Giménez.
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Diez años más tarde, un usuario de Reddit ha intentado trabajar con la imagen para “resucitarla” utilizando inteligencia artificial.
El resultado no es el buscado: aunque lo mejora por una parte, no queda como el original. Ni de lejos.
La historia del Ecce Homo de Borja
Ecce Homo, en latín “He aquí al hombre”, es una representación de una escena de los Evangelios, en la que un golpeado Jesús es presentado por Poncio Pilatos a la muchedumbre que quiere crucificarlo. Tiene puesta la corona de espinas y el manto con el que se burlaban sobre su título de “Rey de los Judíos”.
En el caso español, un artista de la década de los 30, Elías García Martínez, pintó uno para el Santuario de Misericordia de la localidad de Borja. Mide unos 50 centímetros de alto por 40 de ancho.
Pero con el paso del tiempo, el Ecce Homo fue perdiendo su pintura, deteriorándose.
Las autoridades del Santuario, ante las complicaciones, encomendaron el trabajo de restauración a una vecina del lugar, Cecilia Giménez, una aficionada a la pintura de 81 años. No tenía los conocimientos técnicos necesarios para mejorarla definitivamente, mucho menos siendo un retrato.
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Finalmente, el sufriente rostro de Cristo se convirtió en “un esbozo de un mono muy peludo vestido con una túnica de una talla inadecuada”, en la descripción de un corresponsal de la BBC.
El intento de restauración con inteligencia artificial
En Reddit, un usuario utilizó la inteligencia artificial img2img para restaurar el cuadro, pero tampoco dio con el resultado esperado, como lo cuenta el portal Computer Hoy.
GeometryBurger, tal el nombre del usuario, utilizó la herramienta de inteligencia artificial tomando la imagen original y subiéndola, pero salió otro Cristo total y completamente distinto.
En todo caso, no creemos que la localidad de Borja quiera su Ecce Homo como el de antes: la nueva versión, la de Cecilia Giménez, ha generado miles y miles de visitas inesperadas, unas 40 mil personas al año, según Computer Hoy.
Nada mal para un fracaso monumental.