Imagina despertar temprano para tomar el autobús que te lleva al trabajo. Está oscuro aún, pocas personas alrededor, y que al llegar a la parada veas sobre ella un furgón. Sí, un furgón.
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Esta semana hubo conmoción en Francia, específicamente en la localidad de Plounéventer de la región gala Bretagne, cuando habitantes del lugar vieron una camioneta blanca en lo alto de una parada de autobuses. No tiene sentido, pero ocurrió.
El hallazgo se registró el pasado lunes en la para de Place de l’Eglise, y mientras algunos se aterraron por el furgón, otros lo tomaron como otro suceso de nuestro insólito universo y se detuvieron para tomar fotos y publicarlas en su redes sociales, donde se viralizaron rápidamente las imágenes.
La gendarmería de Plounéventer fue informada sobre este extraño hecho y los funcionarios también tomaron algunas imágenes de este sorprendente hallazgo antes desmontar el vehículo de la parada para evitar accidentes.
¿Cómo llegó el furgón allí?
“Es un misterio total. Sabemos quién es el propietario del vehículo, pero no sabemos cómo llegó allí y, sobre todo, por qué”, había dicho el capitán Christophe Laval de la gendarmería a los periodistas franceses, citado en el sitio web de Oddity Central.
Los gendarmes pudieron identificar al propietario del vehículo, pero no habían podido hallar ninguna pista sobre quién o por qué a alguien se le ocurrió montar el furgón en la parada de autobuses hasta este jueves 14 de octubre.
Los usuarios de las redes sociales debatieron al respecto luego de que se viralizara la noticia. Sospechaban que podía tratarse un nuevo tipo de obra de arte moderno, ideada por un artista local o como parte de un proyecto de marketing original, pero la gendarmería aclaró de inmediato que ninguna de esas teorías era plausible en este caso. Incluso, recurrieron a Facebook para pedirle a la gente que los ayudara con pistas en este misterioso caso.
Por casi una semana, el misterio del furgón sobre la parte de superior de una parada de autobuses conmocionó a la localidad francesa y a la nación europea, pero el jueves los medios franceses informaron que el caso fue resuelto: se trató de una “disputa comercial”.
Sin consumo de bebidas alcohólicas de por medio, el dueño de la camioneta y el perpetrador planearon esta disputa, supuestamente por el vehículo en sí. Enfadado, el agresor presuntamente tomó una transpaleta y subió el automóvil a la parada del autobús.
Tanto el propietario del vehículo como el perpetrador fueron llevados para interrogarlos, y este último puede enfrentar cargos.