La facilidad para dormir durante las noches es un tesoro preciado que no todas las personas pueden aplicar. Hay quienes les cuesta un poco más conciliar el sueño. Y durante el confinamiento, producto de la pandemia del covid-19, esta eventualidad de incrementó.
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Hay muchos factores que se tienen que considerar a la hora de diagnosticar los problemas para dormir. Ansiedad, alimentación, confinamiento, preocupaciones y otras tantas son las que los expertos en la materia verifican antes de sugerir una recomendación. Sin embargo, un reciente estudio realizado por la Universidad de Uppsala, en Suecia, agrega una más: la fase lunar.
Según los investigadores, citados por el Daily Mail, la falta de sueño en las noches puede estar afectada por dos fases lunares diferentes: la creciente o la menguante. Además, detallan que esta particularidad afecta mucho más a los hombres que a las mujeres.
¿Qué tiene que ver la Luna?
Explican los investigadores, tras su estudio que estuvo compuesto de un experimento, que el cerebro emite reacciones diferentes ante los dos tipos de fases lunares. En primer lugar, durante la Luna creciente, en la que la luz del satélite natural aumenta, hay peor calidad de sueño. Mientras que, en la Luna menguante, la iluminación es menor y esto facilita la conciliación del sueño.
Además, este inconveniente podría afectar a los hombres en mayor medida. Las razones a este curioso resultado es que, investigaciones previas que estudiaron las respuestas del cerebro, encontraron que el órgano pensante del hombre tienen mayor susceptibilidad a la luz ambiental, que el de las mujeres.
El tema de la Luna y el ser humano siempre ha sido punto de partida para intensas discusiones en la comunidad científica. Hay quienes sostienen que de forma innata, el cerebro está unido al satélite natural, al igual que varios eventos del ambiente en el planeta. Sin embargo, solo hay teorías y experimentos que sugieren tales afirmaciones, y carecen de certezas.
No obstante, los expertos en la materia y autores de esta investigación dicen: “Nuestros resultados fueron sólidos para el ajuste de los problemas crónicos del sueño y la gravedad de la apnea obstructiva del sueño. Nuestro estudio, por supuesto, no puede desentrañar si la asociación del sueño con el ciclo lunar fue causal o simplemente correlativa”, expresó el líder de la investigación, Christian Benedict, profesor asociado del Departamento de Neurociencia de la Universidad de Uppsala.
Para esta investigación, utilizaron a unos 800 voluntarios a los que les pidieron simplemente dormir en habitaciones dispuestas por los mismos científicos. La falta de sueño se registró tanto en hombres como en un mujeres, durante la Luna creciente. Pero en los participantes masculinos hubo mayor vulnerabilidad.