Luego de haber aterrizado con éxito en el cráter Jezero de Marte el 18 de febrero de 2021, el rover Perseverance de la NASA se ha vuelto fundamental para la exploración espacial. Y es que este robot avanzado cuenta con alta tecnología que le permite investigar la geología del planeta rojo y buscar signos de vida. Está equipado con 23 cámaras, instrumentos científicos de última generación y un sistema que le permite recoger muestras del suelo. ¿Su reciente misión? Descubrir los misterios de ‘Bright Angel’.
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Esto, porque en los últimos días el rover Perseverance de la NASA marcó un nuevo hito en su misión marciana al llegar a ‘Bright Angel’, un área destacada por sus formaciones rocosas que tienen el potencial de ofrecer pistas sobre el pasado del planeta rojo.
El rover Perseverance llegó a Bright Angel
Desde enero, el rover había estado navegando por el lado sur de Neretva Vallis, un área que se cree fue un cauce fluvial que alimentó el cráter Jezero, el sitio de aterrizaje del rover. Pero todo cambió durante su exploración, cuando el equipo de Perseverance observó desde lejos el resplandor de ‘Bright Angel’, nombrado así por sus afloramientos de rocas claras, que se presume son vestigios de antiguos cauces de agua.
A medida que se acercaba a esta área, el rover enfrentó un campo de rocas inesperado que complicó su trayecto, obligando al equipo a tomar la decisión de desviar su ruta a través de un campo de dunas. Esta maniobra resultó ser exitosa, permitiendo al Perseverance llegar finalmente a su destino.
Y es que Perseverance utiliza AutoNav, un sistema de navegación autónoma que le permite moverse por el terreno con mayor independencia que los rovers anteriores, que dependían completamente del control terrestre. Aunque inicialmente AutoNav permitía al rover sortear obstáculos menores, las rocas en el camino pronto se volvieron demasiado grandes para manejarlas automáticamente.
En su camino, el rover también descubrió ‘Monte Washburn’, un montículo que presentó interesantes formaciones rocosas, incluida una roca que podría ser el resultado de un antiguo charco de magma subterráneo.
El equipo de Perseverance ahora se prepara para ascender por la pendiente de ‘Bright Angel’, examinando de cerca las capas rocosas y utilizando herramientas como la abrasión para obtener una visión más detallada de su composición química. Si todo sale bien, esta exploración nos ayudará a entender mejor la geología de Marte, y preparará el camino para futuras misiones.
