Este año hemos hablado bastante de las llamaradas solares. De hecho, hace sólo unos días informábamos sobre la más grande que ha afectado al astro rey en aproximadamente siete años.
Aquella fue la tercera erupción de clase X en un lapso de 24 horas, todas ocurridas en la región activa AR 3590, una colosal mancha solar.
Y claro, estamos bastante lejos del Sol, por lo que aquella noticia parece irrelevante para el día a día. ¿El problema? ahora AR 3590 se encuentra en una posición que amenaza directamente a la Tierra.
Potenciales consecuencias de las erupciones solares
Los expertos de la ESA (Agencia Espacial Europea) y la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) han estado monitoreando desde cerca esta mancha solar.
Más ahora que está en una posición que apunta casi directamente a nuestro planeta, fenómeno que podría desencadenar tormentas geomagnéticas y ráfagas de radiación de mayor intensidad.
❗️Strongest flare of solar cycle 25❗️
— ESA Space Weather (@esaspaceweather) February 23, 2024
✨X6.3✨
⭕️Peak 22 Feb 22:34 UTC
⭕️Origin NOAA AR 3590
This AR is making itself known with 3 X-class flares in the last 36 hrs! We'll be keeping an eye on it as rotates towards the centre of the 🌞disk👀
🌐https://t.co/qcul5lmV2x pic.twitter.com/EhaMDf3X10
Dichas ráfagas podrían ser potencialmente devastadoras, sobre todo cuando hablamos de telecomunicaciones, redes eléctricas y sistemas de navegación como los GPS.
Además, no sólo podría causar estragos en este mundo, ya que significarían un riesgo para los astronautas de la Estación Espacial Internacional u otras misiones, además de afectar a satélites y naves.
Por su parte, expertos explican que mientras esta mancha esté apuntando hacia la Tierra, lo más probable es que veamos un aumento en la actividad solar.
Así que si ves una aurora boreal, ya lo sabes: podría ser resultado de esta actividad solar inusual y muy intensa.