La Tierra cuenta con una apariencia distinta a las de los demás planetas del Sistema Solar. El mundo que orbitamos tiene un color azul, si lo vemos desde el espacio, por lo que un equipo de científicos explica este fenómeno que, contrario a lo que muchos pueden pensar, no solo tiene que ver con el agua.
Si a Marte lo conocemos como el “planeta rojo”, la Tierra tranquilamente podría ser el “mundo azul”. El desarrollo de la vida tal y como lo conocemos solo se registra en este cuerpo rocoso del Sistema Solar. Los científicos que han detectado más de 5 mil exoplanetas, no han tenido la fortuna de encontrar algo igual.
De acuerdo con una reseña de Es de Ciencia, la Tierra se ve azul desde el espacio debido a un fenómeno llamado dispersión de Rayleigh. La luz del Sol es una mezcla de todos los colores del arco iris, cada uno con una longitud de onda diferente. La luz de onda corta, como el azul, se dispersa más fácilmente que la luz de onda larga, como el rojo.
Cuando la luz del Sol llega a la atmósfera de la Tierra, las moléculas de aire la dispersan en todas direcciones. La luz azul se dispersa más que la luz roja, por lo que la mayor parte de la luz que llega a nuestros ojos es azul.
Esto es lo que hace que el cielo se vea azul durante el día. Por la noche, el cielo se ve negro porque no hay luz del Sol para que las moléculas de aire la dispersen.
El agua también contribuye al color azul de la Tierra desde el espacio. El vital líquido absorbe la luz roja, lo que hace que el océano se vea azulado. La vegetación también contribuye al color azul, ya que las hojas absorben la luz roja y reflejan la luz azul.