De acuerdo con un estudio, un planeta errante pudo haber entrado en el Sistema Solar. Se encontraría en la lejana nube Oort, una región esférica con fragmentos de hielo y cometas, a miles de millones de kilómetros del Sol.
Su nombre sería Planeta X.
Sean Raymond, Andre Izidoro y Nathan Kaib son los investigadores que publicaron el estudio, disponible en este link de Arxiv. Se denomina Los (exo)planetas de la nube Oort.
Aunque siempre se ha pensado que solo hay cometas en los bordes extremos del Sistema Solar, existe una posibilidad de encontrar a este planeta vecino. Eso sí: son bajas las chances, de un 7%.
A este tipo de planetas se le denomina errante o vagabundo debido a que no tienen una estrella a la que orbitar. En nuestro caso, el Planeta X estaría demasiado alejado del Sol, en los confines del sistema.
“Es completamente plausible que nuestro Sistema Solar haya capturado un planeta de la nube de Oort”, afirma Kaib, astrónomo del Instituto de Ciencias Planetarias. Estos elementos ocultos son “una clase de planetas que definitivamente deberían existir, pero que han recibido relativamente poca atención”.
¿Cómo sería este planeta errante en nuestro Sistema Solar?
Para los investigadores, el Planeta X sería un gigante de hielo, nacido de la desestabilización por la atracción gravitacional, que terminó expulsado del sistema.
Las elucubraciones sobre este cuerpo celeste no son nuevas, remontándose a varias décadas atrás, de acuerdo con Pop Science. Astrónomos lo han buscado no solo en la nube de Oort, sino también en el Cinturón de Kuiper, sin hallarlo.
El estudio de Raymond, Izidoro y Kaib es apenas el más reciente.
“Los planetas sobrevivientes tienen órbitas excéntricas, que son como las cicatrices de su pasado violento”, indicó Raymond, del Laboratorio de Astrofísica de la Universidad de Burdeos. “Sería extremadamente difícil de detectar”.
¿Veremos algún día a nuestro nuevo vecino? No lo sabemos.