De manera simultánea y por diferentes razones, la NASA estudia miles de rocas que habitan nuestro Sistema Solar. Algunas representan un peligro para la Tierra; otras tienen datos para comprender la formación de los mundos y otras son valiosas en minerales para el desarrollo de la Ciencia. Psyche 16, por muy extraño que parezca reúne varias de estas características.
El extraño asteroide, que obligatoriamente necesita de una visita para saber exactamente sus componentes, se sitúa entre las órbitas de los planetas Marte y Júpiter. Se encuentra exactamente en el cinturón de asteroides.
Su brillo es tanto, que no permite que el Hubble, Telescopio Espacial capaz de mirar hacia otras galaxias, detalle exactamente todos sus minerales. Sin embargo, como hay algunas estimaciones, los científicos conocen algunas especificaciones sobre sus elementos.
Es por ello que están gastando casi mil millones de dólares en emprender una misión hacia la roca para investigar, quizás minar dentro de su superficie, y posteriormente regresar con algunas muestras.
No hay que pensar mal de la NASA. Este no es un viaje netamente comercial para buscar metales preciosos.
El principal objetivo es científico. La formación de sus metales, que más adelante detallaremos según las estimaciones iniciales, entregarían información sobre la formación de planetas.
De hecho, según lo reseña BBC Mundo, la NASA explica que su alto contenido de metales sugieren que esta roca es el núcleo de un planeta que falló en su formación. Entonces, estudiar este asteroide despejaría un montón de dudas sobre el nacimiento de los mundos.
Psyche 16: una mina de metales preciosos
Pero aunque tenga muchas implicaciones científicas, a la NASA le llama la atención la cantidad de metales que el asteroide puede tener en su composición. De acuerdo a lo que reseña el mismo medio citado lo llaman el asteroide “dorado”, por la elevada cantidad de oro que tiene.
“Hemos visto otros meteoritos que son mayoritariamente metálicos, pero lo que hace único a Psyche es que puede que esté hecho totalmente de hierro y níquel”, adelanta Tracy Becker, científica planetaria del Southwest Research Institute en Texas, Estados Unidos.
Pero además de estos dos metales, la roca podría estar llena de oro y platino. De esta manera, en caso de ser ciertas las estimaciones previas sobre el asteroide, sus metales tendrían un valor que supera los 10 mil cuatrillones de dólares.
BBC Mundo rescata unos datos de la economía global en 2019, que contabiliza el valor en 142 billones de dólares. Por lo tanto, este asteroide estaría guardando un tesoro que supera en unas 70.000 veces los minerales de la Tierra.
Retraso de la misión Psyche
La misión estaba programada para salir hacia el asteroide entre agosto y octubre de este mismo año. Problemas en el software obligaron a la NASA a retrasar, al menos por un año, el envío de una sonda espacial hacia esta región estelar.
La agencia indica que durante las pruebas realizadas en el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA (JPL o Jet Lab), los ingenieros hallaron un problema de compatibilidad en los simuladores del banco de pruebas del software.
Aunque el problema está corregido, no hay tiempo suficiente para una revisión completa y el lanzamiento en la venta establecida de 2022. Por lo tanto, los años 2023 y 2024 serán decisivos para la misión.