Este 16 de septiembre de 2021 fuimos testigos del arranque de una misión histórica por parte de la gente de SpaceX. Con el lanzamiento de la Inspiration4 una misión que se distinguía por su ambicioso planteamiento, con una tripulación compuesta por civiles que orbitarían varios días alrededor de la Tierra.
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La cápsula Resilience contaba en sus adentros con una tripulación conformada por Jared Isaacman, fundador de la firma de procesamiento de pagos Shift4 Payments, y quien pagó por el viaje, escogiendo a sus compañeros.
Que son Hayley Aceneaux una asistente médica, sobreviviente de cáncer; Christopher Sembroski un ingeniero de datos de Lockheed Martin; y Sean Proctor una geocientífica.
[ SpaceX puso en órbita Inspiration4, con la primera tripulación privadaOpens in new window ]
Tomando en consideración los antecedentes recientes de SpaceX muchas eran las cosas que podían salir mal en los distintos puntos que conformaban la misión. En especial considerando que parte del proyecto contemplaba dejar allá arriba a la tripulación por varios días. Pero todo fue un éxito para Elon Musk y su empresa.
SpaceX vuelva a hacer historia
De acuerdo con los colegas del diario británico The Independent, los turistas espaciales de la misión Inspiration4 lograron amerizar con éxito la noche de este 19 de septiembre de 2021 en la costa de Florida.
Tras tres días orbitando nuestro planeta cada 90 minutos sobre una ruta de 575 kilómetros (que tomó bastante tiempo planear), los cuatro astronautas civiles regresaron sanos y salvos aquí. Y por supuesto, la firma espacial de Elon Musk documentó cada momento en fotografía y video.
El factor principal que constituye un logro con la misión de Inspiration4 es que la cápsula de SpaceX contaba apenas con 3,9 metros de ancho y se mantuvo a una altitud promedio 563 kilómetros. Lo que representa más o menos unos 150 kilómetros de altitud por encima de donde se encuentra la Estación Espacial Internacional (ISS).
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Debido a ese pequeño gran detalle la tripulación de Inspiration4 de SpaceX logró imponer una nueva marca ya que es lo más alto que cualquier humano ha orbitado en décadas.
Se estima que al momento de su descenso, la tripulación de la cápsula se vio expuesta a temperaturas de hasta 1926 grados Celsius, y experimentaron 4,5 Gs de fuerza.
Aunque las cualidades del módulo de regreso de SpaceX hizo que toda esa parte fuera segura y carente de incidentes. La mejor prueba de ello es que todos regresaron sanos y salvos.
Será interesante descubrir qué otros proyectos prepara la agencia espacial de Elon Musk para lo que resta del año y el próximo 2022.
A estas alturas ya se puede tener la expectativa de que habrá alguna que otra sorpresa. Tal vez sin explosiones.
