En el contexto de los Juegos Olímpicos de París 2024, es interesante recordar a aquellos deportistas olímpicos que lograron dar un salto exitoso al mundo del cine y la televisión.
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1.- Johnny Weissmuller
De origen rumano, participó en los Juegos Olímpicos de París en 1924 y en Ámsterdam en 1928, representando a los Estados Unidos.
Weissmuller ganó un total de cinco medallas de oro en natación (100 y 400 metros) y una de bronce en waterpolo, rompiendo 67 récords mundiales en el proceso.
Tras su carrera deportiva, Weissmuller se convirtió en el icónico Tarzán en 12 películas y también protagonizó la serie ‘Jungle Jim’.
2.- Harold Sakata
El hawaiano Harold Sakata se ganó una medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Londres de 1948 en halterofilia, categoría de peso semipesado. Sakata es conocido por su papel como el villano Oddjob en la película “Goldfinger” (1964).
Además de su carrera en el cine, participó en series de televisión como ‘The Amazing Spider-Man’, ‘The Rockford Files’, ‘Quincy ME’, y ‘Gilligan’s Island’.
3.- Ronda Rousey
Ronda Rousey participó en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 y Pekín 2008, ganando una medalla de bronce en judo en su última participación.
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Posteriormente, Rousey se destacó en las artes marciales mixtas (UFC) y la lucha libre profesional (WWE), lo que la llevó a la industria del cine. Una de sus películas más conocidas es ‘Fast and Furious 7′.
4.- Hillary Wolf
A diferencia de otros casos, Hillary Wolf inició su carrera como actriz antes de dedicarse al deporte. Conocida por su papel como la hermana de Macaulay Culkin en ‘Mi pobre angelito’ y ‘Mi pobre angelito 2′, Wolf dejó la actuación para enfocarse en el judo.
Compitió en los Juegos Olímpicos de Atlanta y Sídney, aunque no ganó ninguna medalla.
5.- Mary Lou Retton
Mary Lou Retton, con solo 16 años, ganó cinco medallas en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles en 1984, convirtiéndose en un ícono deportivo.
Aunque su carrera deportiva fue corta, Retton aprovechó su popularidad para forjar una carrera en la televisión estadounidense, destacándose por su carisma y dulzura.
Estos atletas olímpicos no solo destacaron en sus respectivas disciplinas deportivas, sino que también lograron dejar una huella en el mundo del entretenimiento.
Sus historias son testimonio de la versatilidad y talento que pueden trascender las fronteras del deporte y la actuación.