La expectativa y el suspenso son dos de las particularidades que más amamos y al mismo tiempo odiamos de Dragon Ball. Una batalla de cualquier arco se extiende por varios episodios, en los que ocurren una enorme cantidad de giros inesperados, que nos hacen sentir una montaña rusa de emociones.
Pasó con la batalla contra Vegeta, Freezer, Cell y Majin Buu. Sin embargo, durante el arco de Namek, en la que los Guerreros Z se enfrentan al Emperador del Universo y a su ejército, es donde más eterno se hizo el final. Y aunque sabemos que hubo mucho relleno, la gente de Toei Animation no dejó que las emociones se vinieran abajo.
Aunque estábamos desesperados por saber cómo terminaban las cosas, siempre había algo que hacía clic y nos quedábamos enganchados.
De los 72 episodios que tuvo el arco de Namek en Dragon Ball Z, 19 fueron dedicados a la pela entre Goku y Freezer, sin duda el combate más largo de toda la serie, que nos dejó momentos irrepetibles como la primera transformación del Super Saiyajin y la primera vez que vimos la explosión de un planeta.
Momentos más impactantes de Goku vs Freezer en Dragon Ball Z
Si bien la transformación del Super Saiyajin es lo más relevante de la batalla, no podemos olvidar que previo a esto hubo momentos realmente memorables que quedarán por siempre en la memoria de quienes vivimos la saga en su estreno, como por ejemplo, la muerte de Vegeta.
El verdadero orgullo saiyajin
Goku se estaba recuperando en una nave del ejército de Freezer, después de que su cuerpo recibiera un profundo daño cuando el Capitán Ginyu. Cuando se logró reponer de las heridas y acudió al campo para luchar contra el conquistamundos, Vegeta estaba agonizando tras recibir ataques brutales de parte del Emperador del Universo.
Eso nos deja uno de los momentos más impactantes de todo Dragon Ball Z, que es Vegeta implorando a Goku que acabe con Freezer para vengar a toda su raza. Fue una de las primeras muestras de lo que realmente es el orgullo saiyajin.
La transformación antes del Super Saiyajin
Antes de la transformación del Super Saiyajin, Goku ya había dejado de ser un guerrero ordinario. Nadie lo notó porque no había un cambio en su cuerpo como tal. Sin embargo, todos los que presenciaron ese principio de pelea entre Freezer y el saiyajin criado en la Tierra, notaron que había una notable diferencia con respecto al guerrero que habíamos conocido.
La muerte que cambió todo
Goku no necesitó de convertirse en un Super Saiyajin para vencer a Freezer. Lo que pasó fue que se confió y después de un ataque brutal pensó que lo había derrotado y todos se descuidaron. Eso hizo que el Emperador del Universo regresara sediento de venganza. Así fue que asesinó a Krilin y casi mata a Piccolo. Afortunadamente eso hizo que Goku desatara toda su furia y se convirtiera en Super Saiyajin.
Goku no es malo ni con ira desbordada
La transformación del Super Saiyajin se caracteriza por el hecho de que un guerrero saca toda la ira que tiene contenida en su interior. Cualquier persona con esa cantidad de sentimientos impulsivos podría cometer actos violentos de manera desmedida.
No es el caso de Goku, quien después de sentirse completamente ganador (porque Freezer se había cortado en dos él mismo), le perdona la vida y hasta le da un poco de energía para que escape del planeta Namek, a punto de estallar.
Goku le perdona la vida al ser que destruyó su planeta y acababa de matar a su mejor amigo. Todos habríamos entendido exterminara a Freezer, lo merecía más que nadie. Pero el saiyajin criado en la Tierra, fiel a sus convicciones, toma el camino correcto.