El presidente de Rusia, Vladimir Putin, quiere que su gobierno se enfoque en el desarrollo de consolas fabricadas por ellos mismos. El llamado del jefe de estado está motivado por las retiradas de las grandes empresas de videojuegos, que se fueron de su país después de que iniciara el conflicto bélico con Ucrania.
Empresas como Nintendo, Sony (PlayStation), Microsoft (Xbox), Epic Games y Electronic Arts se fueron de Rusia después de que comenzó el conflicto armado con Ucrania. Entonces, ninguna de las nuevas consolas o sus videojuegos están disponible en territorio de Putin.
El portal de RT se hace eco del sitio oficial de Kremlin, en que resaltan las declaraciones de Vladimir Putin, que muestran la necesidad del presidente de que se inicie el desarrollo para la producción de consolas nacionales. El ejecutivo dice que se deberían fabricar consolas estacionarias y portátiles.
Además, Putin insta a que también se cree un sistema operativo propio para el desarrollo de dichas consolas y no depender en lo absoluto de los avances tecnológicos, en materia de videojuegos, de los países de occidente.
Vladimir Putin, en pleno inicio de su cuarto mandado al frente de Rusia (es presidente desde el 2004), hizo estas declaraciones en un foro de desarrollo socioeconómico, en Kaliningrado. Puso fecha tope, ya que dijo que este trabajo debería iniciar el próximo 15 de junio.
RT informa que en febrero de este mismo año, la Organización para el Desarrollo de la Industria de los Videojuegos (RVI) había presentado un plan al gobierno de Rusia, en el que estiman que en cinco años tendrán su propia consola con todo y sistema operativo, hecho en la industria nacional.
Entonces según estiman los representantes de la RVI, Rusia tendrá su propio desarrollo de videojuegos para el 2026 o 2027. Lo que no se sabe es si Putin tendrá la paciencia para esperar tanto tiempo.
