El mundo de los videojuegos tiene su propio museo para inmortalizar los títulos más importantes de la historia. El Salón de la Fama del Museo de Ottumwa, en Iowa (Estados Unidos) elige a los tres nuevos integrantes para ingresar a este sitio de honor.
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Hay doce candidatos, a los que consideramos como titanes, de los que sólo deberían ingresar tres (cuatro en el caso de empates técnicos). Todos son unos clásicos y la nostalgia nos hace elegir a dos seguros, a quienes disfrutamos de estas obras de arte de las primeras consolas de PlayStation.
Sin embargo, hay íconos de finales de los años 70 que marcaron una época y seguro tendrán un lugar en el Salón de la Fama de los Videojuegos de este 2024. Conozcamos entonces a los candidatos, cortesía de Digital Trends.
Para nosotros Guitar Hero y Tony Hawk’s Pro Skater deberían ingresar seguro, pero a medida que vayan viendo el listado se darán cuenta que los contendientes son también importantes y reúnen las condiciones para ser inmortalizados.
Los 12 candidatos para el Salón de la Fama de los Videojuegos
- Asteroids (1979): Un clásico arcade que nos desafió a navegar por el espacio esquivando asteroides y naves enemigas.
- Elite (1984): Un juego de exploración espacial que nos brindó libertad sin precedentes para comerciar, combatir y descubrir secretos en una galaxia abierta. Revolucionó el género con su ambición y profundidad.
- Guitar Hero (2005): Este juego de ritmo nos hizo sentir como estrellas del rock al tocar canciones famosas con una guitarra de plástico.
- Metroid (1986): Un juego de acción y aventura que nos puso en la piel de Samus Aran, una cazarrecompensas espacial. Su innovadora jugabilidad y diseño de niveles inspiró a un sinfín de juegos posteriores.
- Myst (1993): Un juego de aventura gráfica que nos transportó a una isla misteriosa llena de enigmas y puzzles. Su fascinante mundo y su narrativa cautivadora lo convirtieron en un éxito comercial y un referente del género.
- Neopets (1999): Un juego online que nos permitió cuidar de mascotas virtuales, interactuar con otros jugadores y explorar un mundo lleno de actividades. Su propuesta innovadora y su comunidad apasionada lo convirtieron en un fenómeno global.
- Resident Evil (1996): Un juego de survival horror que nos enfrentó a hordas de zombies en una mansión plagada de peligros. Su atmósfera aterradora, su sistema de juego innovador y sus personajes memorables lo convirtieron en un clásico instantáneo.
- SimCity (1989): Un juego de simulación que nos permitió construir y gestionar nuestras propias ciudades. Su jugabilidad profunda y su capacidad para desafiar nuestra capacidad de planificación lo convirtieron en un éxito atemporal.
- Tokimeki Memorial (1994): Un juego de simulación de citas que nos permitió vivir una historia de amor en una escuela japonesa. Su enfoque innovador en la narrativa y las relaciones románticas lo convirtió en un precursor de las novelas visuales.
- Tony Hawk’s Pro Skater (1999): Un juego de skateboarding que nos desafió a realizar acrobacias en escenarios realistas. Su jugabilidad intuitiva, su banda sonora épica y su estilo desenfadado lo convirtieron en un ícono de la cultura pop.
- Ultima: The First Age of Darkness(1980): Un juego de rol que nos sumergió en un mundo de fantasía medieval lleno de aventuras. Su sistema de juego pionero, su narrativa profunda y su libertad para explorar lo convirtieron en un clásico del género.
- You Don’t Know Jack (1995): Un juego de preguntas y respuestas que desafió nuestro conocimiento. Los desarrolladores de este título transformaron para siempre los juegos de trivia, al llevar el formato de la televisión hacia los videojuegos.
