El último arco de Dragon Ball Z, el de la pelea contra Majin Buu, cuenta con varios momentos emotivos protagonizados por los Guerreros Z. De todos, el más impresionante es el de Vegeta haciendo un sacrificio para proteger a su familia: Trunks, Bulma y el resto de los personajes de la Tierra.
Vegeta se sacrifica utilizando una técnica llamada Final Flash, con la que básicamente se autodestruye para exterminar a Buu. Lamentablemente no funciona y el villano color rosa logra regenerarse y seguir sembrando el terror en el planeta.
El príncipe saiyajin nunca aceptó directamente que se equivocó. Tuvimos que esperar hasta las aventuras de Dragon Ball GT para ver como Vegeta admite su error, mientras le da un consejo a Goku durante su pelea contra Omega Sheron.
“Debido a que le resultaba cada vez más difícil derrotar a su enemigo Goku piensa en usar una técnica similar a la que hizo Vegeta para detener al monstruo Buu aunque perdiese su vida en ello”, explica Alfa Beta Juega en una nota.
“Vegeta advierte a Goku que ese método no serviría para nada y que si Goku moría ya no habría ninguna posibilidad para detener a Omega Shenron”, añade el colega que escribió esta explicación.
Con estos detalles, Vegeta acepta que esta fue su peor decisión a la hora de enfrentar a un villano. Se puso al nivel de Chaoz. No queremos desmeritar al pequeño amigo de Ten Shin Han, pero en comparación con los saiyajines, es un guerrero de bajo nivel.