La tecnología supera cualquier tipo de límite y los programas de inteligencia artificial (IA) han colaborado en acelerar muchos avances y hallazgos, incluso en la industria del entretenimiento o el animé.
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Tener a la mano aplicaciones que pueden crear imágenes con solo descripciones de texto ha permitido a diseñadores, ilustradores y fanáticos imaginar cómo se verían sus personajes favoritos en la vida real, pero también hay espacio para los villanos de las animaciones japonesas.
Estas apps de inteligencia artificial permiten crear imágenes a partir de descripciones textuales escritas por los usuarios en su plataforma. Con solo palabras, el internauta obtendrá los resultados.
Muchos conocen las diferentes versiones de DALL-E de OpenAI o Midjourney, softwares basadados en IA con los que los usuarios pueden crear imágenes a partir de texto. Es decir, que si ingresamos en alguna de estas plataformas y escribimos “Freezer en la vida real”, haciendo referencia al alienígena mutante de Dragon Ball, la IA nos mostrará un resultado.
Los villanos del animé en la vida real
Qué mejor forma de empezar este recuento por precisamente Freezer, el tirano emperador responsable de la muerte de los padres de Gokú, así como de la mayor parte de los saiyanos.
Manteniéndonos en Dragon Ball, no podemos dejar por fuera a Cell y a Majin Boo, en sus versiones Perfecto y Kid, respectivamente.
Del universo de One Piece, tenemos un retrato hiperrealista de Donquixote Doflamingo, que como podemos apreciar, mantiene sus curiosos lentes de sol.
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Es difícil elegir al más temible villano de Naruto Shippuden, pero el hecho de que Madara Uchida haya estado detrás de todo el conflicto que se desarrolla a lo largo de la serie, lo hace merecedor de la primera mención.
Otros villanos de Naruto que podemos mostraron Orochimaru, que simula perfectamente su tono de piel, y Uchiha Obito, con sus respectivos colores de ojos.
Estos solo son algunos ejemplos de lo que se puede conseguir en Internet, redes sociales y YouTube sobre personajes del animé en formato de vida real, gracias a los programas de inteligencia artificial. En algunos casos los parecidos no son tan sorprendentes, pero en otros los fans quedan encantados.