El arco de Majin Buu en Dragon Ball Z, además de presentar a un villano espectacularmente poderoso, nos abrió hacia el universo de las fusiones. Goten y Trunks pusieron la primera piedra de esta edificación que nunca va a parar de crecer.
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Y es que saber que dos personajes se pueden fusionar por al menos 30 minutos e incrementar su poder, hace a cualquiera experimentar lo que sucedería entre las uniones más extrañas, insólitas o desubicadas.
No es solo cosa de los seguidores que realizan fanarts, la misma producción del manga y el animé lo sabe e impulsa que se realicen este tipo de diseños.
¿Cómo? En la época de los años 90, en la revista Shonen Jump motivaban a los lectores a que enviaran sus propuestas de fusiones.
De esta manera, elegían los que a ellos les parecían más graciosas o insólitas y aparecían publicadas en los siguientes números.
La última semana de junio, los colegas de Hobby Consolas nos recordaron una increíble entre Cell y Roshi. Y ahora nos traen una aún más inimaginable: la de Mr. Popo y Milk, la esposa de Goku.
Dragon Ball y sus interminables fusiones
Las fusiones de Dragon Ball son interminables. Lo notamos a cada rato con este tipo de iniciativas por parte de la revista Shonen o por las múltiples cuentas de fanarts que seguimos a diario.
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Imaginemos las cosas que tendrían que pasar para que Milk y Mr. Popo se tengan que fusionar. En primer lugar, el cuidador del templo de Kamisama tendría que bajar su nivel hasta igualarlo con el máximo de Milk.
Después, lo que sería aún más chistoso, que ambos realicen la danza de la fusión hasta encontrar sus dedos índices. Toda la escena a cualquiera le saca al menos una sonrisa.
La imagen que queda es la de Milk, con la contextura y el rostro de Mr. Popo.
