El sentido del humor blanco ha estado muy presente en el Universo Cinematográfico de Marvel. Mientras los superhéroes viven sus aventuras, hay situaciones o comentarios que nos hacen reír, lo que sirve para aliviar ciertas tensiones.

En Avengers: Endgame, cuando Scott Lang o Ant-Man escapan accidentalmente del Reino Cuántico y los Vengadores se dan cuenta, gracias a su intervención, de que podrían revertir el chasquido mortal de Thanos reuniendo las Gemas del Infinito con un viaje en el tiempo.

En ese moemnto, Bruce Banner y Rocket viajan a Noruega para intentar reclutar al hijo de Odín, y se encuentran lo que los espectadores llamaron Fat Thor (Thor gordo). El dios del trueno siempre se había distinguido por su musculatura, y contrasta con esta versión que vemos en Endgame.

¿Qué te pasó Thor?

Los arrepentimientos de no ir por la odiosa cabeza de Thanos con el hacha Stormbreaker al final de guerra infinita (Hermanos Russo, 2018) y, por tanto, no haber podido detenerlo, y la posterior confirmación, a principios de fin del juego, que las Gemas del Infinito ya no existían, le causaba una profunda inquietud. Y se dedicó a beber y jugar videojuegos con Korg en New Asgard.

Su mal estado, sin afeitado ni buen corte de pelo y un aumento de peso, se utilizan como alivio cómico en la película, pero esta figura fue muy criticada por los espectadores que criticaron que se usara “un caso de depresión” para hacer reír al público. También les molestó el “Fat Thor”. Y el contraste entre “Thor” y “Fat Thor” es notorio.

Sin embargo, el nombre oficial para él en su situación no era Fat Thor, sino Bro Thor, que se relaciona con su personalidad despreocupada, juvenil y fiestera, no con su estado físico. Una opción mucho menos controvertida, sin duda. Y “Bro” en Estados Unidos, es el diminutivo de “brother” (hermano) que suele usarse entre amigos “buena onda” (como se dice en Chile).

¿Sabías que se llamaba así?