Dragon Ball Z tiene la particularidad de darle un protagonismo más amplio a otros personajes que no son ni Vegeta, ni Goku. Aunque estos dos saiyajines puros siguen siendo los más poderosos, y los que casi siempre dan el puntazo final para exterminar a algún enemigo, el resto de los guerreros Z participan activamente en la batalla.
PUBLICIDAD
Uno de estos es Piccolo, quien desde el principio de Dragon Ball Z comienza a evolucionar desde malvado villano a instalarse en el Templo Sagrado de Kami Sama y posteriormente de Dendé. Piccolo pasó por varias etapas que poco a poco le fueron ablandando el corazón.
Una de estas sin duda es su momento como maestro de Gohan. Si bien fue bastante cruel, siempre lo hizo con la intención de impartir conocimiento en un niño que escondía un grandioso poder. No hay que dejar de lado que Piccolo estaba entrenando al hijo de su más acérrimo rival. Y además de enseñarle un montón de técnicas y actitudes de pelea, desarrolló incluso un lazo paternal.
Dicha relación con el pequeño mitad saiyajin mitad humano lo hizo eventualmente hacer las paces con Goku. Además, dejó de ver a la Tierra como un planeta para conquistar y la comenzó a ver como un mundo para defender.
Y lo hizo siempre demostrando un sorprendente poder de pelea que lo igualó en algunas ocasiones con el mejor nivel de Vegeta y Goku. Para llegar a esto, Piccolo no solo entrenó, sino que además atravesó un par de fusiones. Mismas que logró manteniendo su más pura esencia, pero adquiriendo el poder del guerrero con el que se fusionó.
La escena de Piccolo con LEGO
La primera de estas fusiones la logró en el planeta Namek, durante la saga de Freezer. El momento lo ameritaba y cuando Piccolo llegó a su mundo natal se encontró con un guerrero llamado Nail.
Este, al unir fuerzas con el peleador que todos conocemos, llegó a un punto en el que estuvo a punto de salvar la jornada de terror que lideraba Freezer.
Al final todos sabemos como terminó esta historia: el conquista mundos se sometió a una nueva forma y ya fue inalcanzable para el namekiano. Sin embargo, llegó Goku y con la muerte de Krillin se convirtió en Super Saiyajin para salvar el universo.
Pero la llegada de Piccolo al planeta namekuseí es un hecho realmente curioso debido a que fue resucitado, y fue precisamente ese momento el que ilustró este usuario de Reddit en un video que hizo con un Piccolo de LEGO.
El maestro de Gohan estaba muerto (producto de su batalla contra Nappa) y entrenando en el planeta de Kaio Sama. Entonces, al juntar las esferas del dragón en Namekuseí, Gohan y Krillin pidieron dos deseos: revivirlo y que el Shenlong de ese planeta lo lleve al campo de batalla.
Fue un momento de pura adrenalina para Piccolo quien pasó de estar entrenando junto a Ten Shin Han, Chaos y Yamcha, a enfrentar a uno de los villanos más temibles de toda la saga de Dragon Ball Z.
De esta manera, veamos esta maravillosa obra de arte que desarrolló U/minilifeTv.