Un equipo internacional de arqueólogos ha desenterrado un tesoro oculto en las profundidades de Luxor: un sarcófago que data del Imperio Medio de Egipto, un período que se extendió desde el siglo XXI al XVIII a.C. Este hallazgo, anunciado por Frédéric Colin, director del Instituto de Egiptología de la Universidad de Estrasburgo, podría ser un punto de quiebre en lo que la humanidad conoce sobre las prácticas funerarias de una de las civilizaciones más antiguas del mundo.
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Poco se conocía sobre el Imperio Medio y sus prácticas
El descubrimiento se produjo a mediados de diciembre pasado, cuando los arqueólogos, en las últimas etapas de su campaña de excavación, se toparon inesperadamente con este antiguo ataúd. El sarcófago se encontraba en un complejo arqueológico de Luxor, una región que ha sido durante siglos un foco de atención para los exploradores y arqueólogos debido a su rica historia y abundantes vestigios del pasado.
Colin destacó la importancia de este hallazgo: “Este descubrimiento no solo enriquece nuestro conocimiento sobre el Imperio Medio, sino que también plantea nuevas preguntas sobre las conexiones entre diferentes períodos de la historia egipcia”.
Los investigadores aún no han podido abrir el sarcófago, pero esperan que en la próxima temporada de excavaciones puedan revelar sus secretos. Se anticipa que en su interior se encuentren objetos funerarios, inscripciones jeroglíficas y, posiblemente, restos momificados que proporcionarán valiosa información sobre la vida y creencias de los antiguos egipcios.
Este descubrimiento no es un hallazgo aislado, pues se suma a los realizados en la misma zona en años anteriores lo que para los investigadores es una muestra de la posible existencia de euna gran cantidad de sarcofagos que esperan a ser descubiertos. Los arqueólogos creen que el nuevo sarcófago podría estar relacionado con los que han realizado anteriormente, ofreciendo pistas sobre la organización social y las prácticas funerarias de la época.
“Este descubrimiento es solo el comienzo de una nueva y emocionante etapa en nuestras investigaciones”, afirmó Colin. “Estamos ansiosos por descubrir los secretos que guarda este antiguo ataúd y por compartir nuestros hallazgos con el mundo”.
El hallazgo de este sarcófago ha generado gran expectación en la comunidad arqueológica internacional. Los investigadores planean utilizar las últimas tecnologías, como la tomografía computarizada y el análisis de carbono 14, método que utiliza este isótopo radiactivo para determinar la edad de ese descubrimiento.