El 2024 fue movido para la comunidad científica y arqueológica. En enero de este año fue que se dio el sorprendente hallazgo de un carruaje, casi en perfectas condiciones, perteneciente a Qin Shi Huang, primer emperador de la China unificada que conocemos hoy.
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Su hallazgo tiene muchos significados, por el simple hecho de que se encontraba en su mausoleo, que es además la zona en la que se encontraron los más de 8.000 ejemplares de los soldados de terracota. Toda esa parafernalia, para de cierta forma proteger a los restos de Qin Shi Huang, ahora se completan con otro elemento, que es este carruaje de 7.2 metros, con unos 2.200 años de antigüedad.
Es por eso que vamos a descifrar el verdadero significado, que todo este tiempo se ha mantenido oculto, sobre esta investigación sin precedentes para la ciencia y la arqueología.
Un símbolo de poder
Si alguno tenía duda del poder de Qin Shi Huang, con los miles de soldados de terracota a su alrededor, este carruaje las despeja por completo. Tener este tipo de transporte es un símbolo de lo imponente que era el emperador en la dinastía que representó, entre los años 221-206 a.C.
Haber encontrado este carruaje reafirma la capacidad que tenía este imperio, con sus técnicas de construcción, los materiales utilizados y los diseños decorativos, que simplemente revelan el alto nivel de conocimiento técnico y artístico de la época.
La dinastía Qin marcó el inicio de la China unificada, y cada hallazgo asociado al emperador es una luz sobre cómo se consolidó ese imperio y su cultura administrativa.
Otro de los aspectos que sorprende es la preservación del carruaje, especialmente la madera y las decoraciones. Dichos elementos abren debates sobre las técnicas que podrían haberse utilizado en la antigüedad y cómo replicar esos métodos para proteger otros hallazgos similares.
