Santa Claus, Papá Noel o el Viejo Pascuero existió en la vida real. Un equipo de arqueólogos recreó lo que fue el rostro del legendario santo del cristianismo, basados en los hallazgos de los restos de quien inspiró el mito de su existencia, San Nicolás de Myra.
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El mito de a quien hoy identificamos como Santa Claus, por su nombre anglosajón, nace de las historias de San Nicolás de Myra, santo del cristianismo que murió en el año 343 d.C defendiendo los ideales y las bases de la iglesia católica, a pesar de que quien gobernaba en ese entonces era el Imperio Romano.
Los restos de este santo se encontraron originalmente en la Iglesia de San Nicolás en Mira (actual Demre, en Turquía) tras su muerte. Esta iglesia se construyó en su honor, y durante siglos fue un importante lugar de peregrinación.
Los restos de Santa Claus
Mucho tiempo después, en el año 1087, durante un período de inestabilidad en la región de Anatolia causada por las invasiones musulmanas, un grupo de comerciantes italianos de Bari tomó los restos de San Nicolás y los trasladó a su ciudad.
Temían que las reliquias pudieran ser destruidas o profanadas. Una vez en Italia, los restos fueron depositados en la Basílica de San Nicolás, construida especialmente para albergarlos. Este traslado convirtió a Bari en un importante centro de devoción a San Nicolás, y su festividad se celebra cada año el 6 de diciembre.
De acuerdo con una reseña de Daily Mail, en 2017, arqueólogos turcos realizaron exploraciones en la Iglesia de San Nicolás en Demre. Usando escáneres y tecnología de radar, descubrieron lo que podría ser una tumba intacta bajo el piso de la iglesia.
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Algunos expertos sugirieron que esta tumba podría contener los restos originales del santo, lo que generó controversia, ya que la mayoría de las reliquias ya habían sido trasladadas a Bari.
El rostro de Papá Noel
Después de estudiar detalladamente cada composición y formación del cráneo, arqueólogos y expertos en digitalización lograron recrear con un escáner lo que era el rostro de Santa Claus.
Los expertos describen el rostro como " fuerte y gentil”. Además, explican que las facciones son compatibles con la descripción del poema “Twas The Night Before Christmas”, de 1823, que habla de la existencia del santo.
