Los dibujos de una tumba de hace 1.300 años, en una región de China, sorprenden a los arqueólogos y científicos que realizaron su descubrimiento. En el arte milenario, perteneciente a la dinastía Tang, se aprecia un hombre rubio de etnia completamente diferente a los entonces pobladores del gigante de Asia. ¿Es el legendario Super Saiyajin?
La presencia de un hombre rubio en la etnia de China es, cuanto menos extraño. Vale la aclaración de que no es un Super Saiyajin, pero no podíamos obviar las similitudes de este hallazgo.
El descubrimiento se dio recientemente, en un yacimiento arqueológico que surgió en el medio de una carretera en las afueras de Taiyuan, capital de la provincia de Shanxi, en el norte de China en el 2018. La tumba es del siglo VIII y está perfectamente conservada, según informa National Geographic.
Después de sacar los restos de las tumbas, encontraron dibujos en sus cortezas exteriores, una práctica común de la dinastía Tang, que lo hace para ilustrar a quienes están enterrados en el sarcófago y la actividad a la que se dedicaban.
¿Qué hace un hombre rubio en China hace 1.300 años?
La imagen del hombre rubio aparece con un látigo, subido a una carreta y conduciendo un grupo de camellos y caballos.
Algo está muy claro para los arqueólogos que realizaron el descubrimiento: Las personas que están dibujadas en las tumbas son las mismas en diferentes ejemplares, por lo que claramente son una representación de varias épocas de quienes fueron enterrados.
Con respecto al hombre rubio, el investigador Victor Xiong, que no fue parte del descubrimiento, dijo que “el hombre rubio que conduce los camellos lleva una vestimenta característica. Basándonos en sus rasgos faciales y en su modo de vestir podemos identificarlo como un ‘occidental’, probablemente un sogdiano (un pueblo que comerciaba a lo largo de la ruta de la Seda entre Asia y Europa y que vivía principalmente en lo que hoy son Tayikistán y Uzbekistán)”, explicó.
Además del hombre rubio, hay imágenes de personas de la etnia china, dibujos de un dragón y un fénix.
