En este contexto, la NASA ha dado un paso adelante en la evolución de las comunicaciones espaciales mediante el uso de láseres infrarrojos, una tecnología que promete revolucionar la forma en que nos conectamos con el espacio.
¿Qué son los láseres infrarrojos?
Los láseres infrarrojos son dispositivos que emiten luz en la región del espectro electromagnético conocida como infrarrojo, que se encuentra justo por debajo del espectro visible. Esta luz no es visible para el ojo humano, pero tiene propiedades únicas que la hacen ideal para aplicaciones en comunicaciones.
En comparación con las ondas de radio tradicionales, los láseres infrarrojos pueden transmitir una cantidad significativamente mayor de datos a velocidades mucho más rápidas. Esto se debe a que la longitud de onda más corta de la luz infrarroja permite una mayor densidad de información.
¿Cuáles son las aplicaciones en materia de comunicaciones espaciales?
Históricamente, la NASA ha utilizado ondas de radio para las comunicaciones espaciales; sin embargo, estas tienen limitaciones en términos de capacidad y velocidad de transmisión de datos.
Con el avance de las misiones espaciales y el creciente volumen de datos científicos que se generan, la necesidad de un sistema de comunicaciones más eficiente se ha vuelto crítica. Aquí es donde entran en juego los láseres infrarrojos.
¿Por qué tecnología láser?
La tecnología láser no solo permite una transmisión de datos más rápida y eficiente, sino que también es menos susceptible a las interferencias y puede operar en bandas de frecuencia que no están congestionadas por otras formas de comunicación. Esto es particularmente importante para las misiones de larga duración y gran distancia, como las futuras misiones a Marte.
La misión de prueba: transmisión 4K en el espacio
En una serie de pruebas pioneras, los investigadores de la NASA han demostrado con éxito las capacidades de las comunicaciones láser en el espacio mediante la transmisión de imágenes de video 4K.
Este experimento involucró un avión equipado con una terminal láser portátil que sobrevoló el lago Erie. Desde allí, se enviaron datos al centro de Cleveland en Ohio.
Posteriormente, los datos se transmitieron a través de una red terrestre hasta las instalaciones de pruebas de la NASA en Nuevo México.
El Papel del LCRD y el ILLUMA-T
Una vez en Nuevo México, los datos fueron controlados por científicos y enviados al satélite de demostración de retransmisión de comunicaciones láser (LCRD) de la NASA, situado a 35.000 kilómetros de distancia.
Este satélite desempeñó un papel crucial al retransmitir los datos a la Estación Espacial Internacional (EEI) mediante el terminal amplificadora y módem de usuario de órbita terrestre baja para demostración de retransmisión de comunicaciones láser integradas (ILLUMA-T).
El Dr. Daniel Raible, investigador principal del proyecto HDTN en el Centro de Investigación Glenn de la NASA, afirma que estos experimentos son un logro tremendo y que, gracias a ellos, ahora es posible aprovechar la transmisión de videos en alta definición 4K hacia y desde la estación espacial para brindar capacidades futuras, como videoconferencias en alta definición para los astronautas de las misiones Artemis.
¿Cómo será el futuro de las comunicaciones espaciales?
Las misiones Artemis, que tienen como objetivo llevar a la primera mujer y a los próximos hombres a la Luna, son un hito crucial en la exploración espacial.
La capacidad de transmitir datos y videos en tiempo real desde la Luna a la Tierra será vital para el éxito de estas misiones. Además, la tecnología de comunicaciones láser desempeñará un papel esencial en la salud de la tripulación y la coordinación de actividades.
No obstante, la visión de la NASA va más allá de la Luna. La agencia espacial está mirando hacia Marte, donde las comunicaciones rápidas y eficientes serán aún más críticas.