Cuando Elon Musk y Neuralink anunciaron que habían iniciado con su convocatoria de búsqueda de voluntarios para encontrar alguien que estuviera dispuesto a que le implantaran un chip neuronal sabíamos que sólo era cuestión de tiempo para que sucediera.
Ese momento por fin ha llegado y el multimillonario tecnológico anunció el lunes 29 de enero de 2024 que su empresa de ciencias neuronales, Neuralink, había implantado finalmente un dispositivo en un humano por primera vez.
El paciente mantiene su identidad anónima, pero por los requisitos en la convocatoria publicada podemos deducir que se trata de alguien con parálisis de las cuatro extremidades.
Persona que recibió el implante el domingo 28 de enero, casi bajo total secreto, hasta que terminó la intervención, sobrevivió y ahora se está recuperando bien, según el propio Elon Musk.
El dispositivo, llamado Link de manera provisional, es un implante cerebral inalámbrico que consta de una pila de chips y electrodos que se colocan en el cerebro.
El Link, en teoría, permitirá a los usuarios controlar dispositivos externos con sus pensamientos, como teléfonos, computadoras y sillas de ruedas. Pero es una tecnología en una etapa muy preliminar.
Elon Musk desafía al futuro con Neuralink y su primer paciente humano
Musk según relata en su breve publicación en X (algo inusual en él para sus hábitos de comunicación en la plataforma) que los resultados iniciales del implante son prometedores.
E incluso se dio el lujo de dar los primeros detalles sobre el supuesto primer producto de Neuralink, llamado Telepathy, que permitiría controlar dispositivos con el simple hecho de pensarlo:
Este sería un hito importante en el desarrollo de la tecnología de interfaz cerebro-computadora, ya que representaría un paso más hacia la creación de una nueva forma de comunicación y control para las personas con discapacidades.
Este anuncio por sí mismo sería un avance significativo para la investigación de esta clase de interfaces. Sin embargo, todavía hay desafíos que deben superarse antes y las próximas semanas con ese paciente serán cruciales.
Desde que los algoritmos puedan interpretar con precisión las señales cerebrales hasta el simple hecho de que sobreviva con una calidad de vida adecuada.
Por lo pronto, si todo sale en orden, como sería lógico esperar, Elon Musk y Neuralink implementarían más chips en más voluntarios.
Queda un amplio camino por recorrer en ese sector para lograr una plataforma funcional y hasta confiable para la salud de los humanos.
Pero si todo avanza en orden definitivamente Neuralink y el propio Musk habrán logrado dar un paso importante.