Científicos de Alemania y Canadá realizaron un estudio con el que revelaron que las personas con trastorno por consumo de cocaína experimentan cambios y el envejecimiento de su cerebro a un ritmo acelerado.
Si bien la razón evidente puede ser que esta droga es uno de los estupefacientes más adictivos por los humanos, de acuerdo con un informe publicado en el sitio web de Gizmodo, la razón de la investigación es que la cocaína interfiere con las vías de recompensa del cerebro.
Al interferir en esas vías, la droga obliga a las células a continuar bombeando señales placenteras hasta que el efecto de la sustancia desaparezca.
¿Cómo llegaron a esta conclusión?
Los investigadores analizaron los tejidos cerebrales humanos post-mortem de personas que tenían adicción a la cocaína y otras que no. De esta forma, encontraron que las personas con trastorno por el uso de la droga acumularon cambios en el ADN en el cerebro asociados con el envejecimiento biológico a un ritmo acelerado.
El estudio revela que existen modificaciones no codificantes en el ADN dentro de las células del cerebro que afectan el mecanismo de activación y desactivación de genes.
Estas modificaciones son conocidas como cambios epigenéticos, patrones que fueron analizados en el estudio en una región del cerebro llamada Área 9 de Brodmann, ubicada en la corteza prefrontal y forma parte del cerebro detrás de la frente.
Se cree el Área 9 de Brodmann regula la autoconciencia y el control inhibitorio, ambas cosas afectadas por los trastornos por uso de sustancias.
Los investigadores compararon los niveles de metilación del ADN en muestras de tejido cerebral de 21 personas, cada una de las cuales tenían trastorno por consumo de cocaína y otras que no. Comprobaron que en la región de Área 9 de Brodmann, los usuarios de cocaína tenían segmentos de ADN llenos de grupos metilo.
Stephanie Witt, autora principal del estudio y bióloga molecular del Instituto Central de Salud Mental de Alemania, explicó: “Detectamos una tendencia hacia un envejecimiento biológico más fuerte del cerebro en individuos con trastorno por consumo de cocaína en comparación con individuos sin trastorno por consumo de cocaína. Esto podría ser causado por procesos de enfermedades relacionadas con la cocaína en el cerebro, como inflamación o muerte celular”.
“Se requieren más estudios para investigar este fenómeno, con tamaños de muestra más grandes que los posibles aquí”, concluyeron los expertos.