Los veterinarios del Zoológico de Phoenix, en Arizona, están administrando la primera dosis de la vacuna contra el coronavirus COVID-19 a 75 animales para evitar que el virus se propague entre las especies que tienen contacto cercano con los visitantes.
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Grandes felinos como tigres de Sumatra, jaguares y leones africanos, muchos de los primates del zoológico, como los orangutanes de Borneo y los diminutos tamarinos emperador, y los murciélagos frugívoros, los armadillos y los perezosos de dos dedos egipcios se encuentran entre los 75 animales que ya han recibido las primeras inoculaciones, asegura en un informe el sitio web del Daily Mail.
A muchos de los animales se les ha dado la primera vacuna, pero los grandes felinos están siendo vacunados a distancia con el uso de dardos.
El veterinarioGary West, vicepresidente senior de salud animal del zoológico, expresó en un comunicado: “(Los animales) se lo toman mucho mejor que la gente. No les gusta, pero se recuperan y vuelven a sus vidas”.
Diferencias de la vacuna para los animales con las de los humanos
La vacuna que se administra a los animales es diferente de la que se inyecta a los humanos, ya que se dirige al antígeno de las proteínas de la espiga.
Fue desarrollada específicamente para animales por Zoetis, una compañía global de salud animal con sede en Nueva Jersey que donó las dosis. La vacuna está autorizada para uso de emergencia para proteger especies en peligro de extinción.
West dijo que el zoológico de Phoenix ha estado tomando precauciones para proteger a los animales durante la pandemia con equipos de protección y distanciamiento. Hasta ahora, no se han detectado casos de infección por coronavirus entre los animales del zoológico de Phoenix.
“Las inoculaciones deberían dar a los animales más susceptibles una capa adicional de protección”, agregó el veterinario.
Antecedentes de coronavirus en animales
Los zoológicos de Estados Unidos se han enfrentado recientemente a los brotes de COVID-19 entre sus animales y ahora se están organizanco para vacunar a sus animales.
En marzo, nueve grandes simios del zoológico de San Diego se convirtieron en los primeros no humanos en recibir la vacuna COVID-19. Cuatro orangutanes y cinco bonobos, distraidos con golosinas, recibieron dosis de una vacuna experimental contra el coronavirus desarrollada específicamente para animales el mes pasado.
Curiosamente uno de esos orangutanes, cuyo nombre es Karen, fue el primero en el mundo en someterse a una cirugía a corazón abierto en 1994.
Las vacunas se entregaron después de que ocho gorilas en el zoológico dieron positivo por COVID-19 en enero después de ser infectados por un cuidador del zoológico.
Otros animales no tuvieron tanta suerte, como tres leopardos de las nieves en el zoológico infantil en Lincoln, Nebraska, que murieron a causa del virus en noviembre.
Llamados Ranney, Everest y Makalu, contrajeron el virus en octubre. Al trío de leopardos de las nieves se les tomaron hisopos nasales y muestras fecales después de que los criadores de animales “observaron síntomas consistentes con el virus en los felinos”, que pueden incluir dificultad para respirar o falta de aire. Estaban siendo tratados con esteroides y antibióticos para prevenir una infección secundaria, pero no fue suficiente para salvarlos.