Tenemos muchas evidencias de que los seres humanos hemos causado un cambio en el clima de la Tierra, de como era hace algunos siglos, antes de que empezáramos a usar combustibles fósiles.
Con la Revolución Industrial cambiamos las formas de producir muchas cosas, de transportarnos y en general nuestro modo de vida, se volvió más urbano que rural, pero eso no fue lo único que cambió.
En la combustión del carbón o derivados del petróleo se produce dióxido de carbono, un gas que de manera natural está en la atmósfera y que contribuye a mantener una temperatura templada en la Tierra.
Un aumento en la concentración del dióxido de carbono, hace mayor el efecto invernadero que tiene, lo que entonces aumenta la temperatura del planeta. Y eso es lo que ha sucedido en los últimos 200 años, después de que inició la Revolución Industrial.
Este aumento en la temperatura promedio del planeta es a lo que llamamos calentamiento global, pero esa no es la única consecuencia del cambio climático: hay muchas consecuencias que vivimos todos los días, pensemos en ellas o no.
Eventos meteorológicos extremos
Uno de los efectos del cambio climático es que hay eventos meteorológicos más extremos. Esto porque los cambios en las temperaturas, especialmente la de los océanos, hace que las tormentas que se forman ahí tengan más consecuencias.
Uno de los ingredientes principales para que se forme un huracán o un tifón, es que haya océanos con temperaturas templadas o cálidas.
Así que el calentamiento global ha hecho que estas tormentas tengan más poder destructivo, ya sea por la fuerza de sus vientos o por la cantidad de agua que llevan.
Suministro de alimentos
Los cambios en el clima, definitivamente afectan las condiciones del tiempo atmosférico: eso quiere decir que puede haber más lluvias e inundaciones, o tiempos más cálidos.
A final de cuentas, para tener alimentos dependemos de las condiciones del clima, así que estos cambios en las temperaturas, las lluvias extremas y las sequías afectan la cantidad y el tipo de alimentos que podemos tener en nuestras mesas.
Ciudades en riesgo
Los climas extremos no solamente afectan a las zonas agrícolas, sino por supuesto a las ciudades.
Pero también las lluvias extremas ya causan daños en las ciudades: inundando casas y dañando infraestructura urbana como calles y sistemas de distribución eléctrica, por mencionar algunos.
Cambio climático y salud
Ya podemos medir los efectos del cambio climático en la salud humana. Por un lado el calor extremo ocasiona más incendios forestales: eso aumenta la contaminación del aire en todo tipo de zonas, urbanas o rurales, que tiene consecuencias claras en nuestra salud respiratoria.
Además, que haya climas más calurosos hace que los mosquitos que transmiten enfermedades como el dengue o la malaria, puedan vivir en zonas más altas, que normalmente no eran cálidas, y así se extiende la prevalencia de esas enfermedades tropicales.
Especies y ecosistemas en peligro
Esos efectos en el comportamiento de los mosquitos, es un ejemplo de cómo el cambio climático tiene un impacto real en los seres vivos y los ecosistemas que nos rodean.
Otros efectos se pueden ver en los océanos, que no solo se vuelven más cálidos, sino que como absorben dióxido de carbono, se vuelven más ácidos. Esto por ejemplo causa daños irreparables en los corales. Y como un arrecife de coral es un ecosistema muy biodiverso, esto también perjudica a muchas otras especies marinas.