El calamar es un animal que se volvió muy popular en los últimos días, pero no necesariamente por mérito propio.
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La serie de Netflix El juego del calamar, fue la trajo a colación la mención de este molusco, aunque por supuesto en ella de lo que menos se habla es de calamares.
[ El juego del calamar, la exitosa serie de NetflixOpens in new window ]
Aunque la referencia del nombre tiene que ver con que está inspirado en un juego de niños muy popular en Corea del Sur. Este juego toma su nombre de que la forma del espacio de juego tiene un ligero parecido a un calamar: con un espacio grande que es una cabeza y otros espacios que podrían los brazos.
Pero sin importar que tanto tienen que ver con los calamares reales, cualquiera de estos juegos, siempre es un buen momento para saber más de estos extraños animales marinos.
Son parientes de los pulpos
El calamar es un tipo de molusco cefalópodo, igual que los pulpos. Cefalópodo quiere decir cabeza y pies, porque es casi lo único que son estos animales invertebrados: una cabeza con tentáculos.
Los calamares forman parte de la orden de los téutidos, en la que hay diferentes especies. Todas estas especies, comparten ciertas características básicas: como que tienen 8 tentáculos, pero además dos brazos, que son parecidos a los tentáculos pero más largos.
Existen algunas especies de calamares gigantes, que pueden medir desde 4 hasta 12 metros.
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Tienen varios corazones
Un calamar tiene muchos brazos, pero también varios corazones. En realidad tiene un solo corazón principal y dos corazones “auxiliares”.
Estos corazones, que se denominan branquiales son bombas complementarias, que funcionan sobre todo en condiciones anaeróbicas, es decir en las que no hay aire.
Además estos corazones branquiales, participan en la producción de hemocianina: la proteína de la sangre que transporta el oxígeno, que es análoga a la hemoglobina humana, pero que contiene cobre, en lugar de hierro.
Son cazadores implacables
Tal vez no pensamos mucho en lo que comen los animales marinos, o pensamos que solo los animales muy grandes son carnívoros, pero en realidad para los hábitos alimenticios no importa el tamaño.
Además, los brazos de los calamares son lo suficientemente fuertes, para atrapar presas grandes.
Así que los calamares son cazadores: con sus tentáculos identifican a sus presas y luego las atrapan definitivamente con sus brazos.
Tienen un cerebro muy complejo
Un calamar puede ser un animal invertebrado, pero junto con los demás cefalópodos, es uno muy inteligente.
Estos moluscos marinos, tienen los sistemas nerviosos más complejos entre todos los invertebrados del planeta.
Si bien no tiene cráneo, el calamar tiene una cubierta de cartílago que cubre el cerebro, el cual tiene una forma de anillo: en medio del cerebro del calamar atraviesa su esófago.
Han inspirado nuestra imaginación
Un calamar, si bien es un cazador y es muy inteligente, no es un animal peligroso, excepto si es uno muy grande.
Aunque los ataques de calamares gigantes son algo realmente muy raro, su existencia ha cautivado la imaginación de las personas desde hace siglos.
Desde entonces se han contado y escrito historias en las que hacen aparición calamares como animales marinos peligrosos e imponentes. El ejemplo más claro de esto ha quedado plasmado en la famosa novela de Julio Verne: “20,000 leguas de viaje submarino”.
Pero los calamares también pudieron haber inspirado las historias de otros seres mitológicos, como la Medusa o Escila, un monstruo marino que aparece en la Odisea.
Y bueno también inspiran juegos infantiles, que luego se convierten en la serie más exitosa del momento.