El vuelo «histórico» de Virgin Galactic con Richard Branson tuvo un fallo delicado que ha restringe a la empresa que realice más viajes.
Todos nos quedamos impresionados en julio de este 2021 cuando Richard Branson fue el primer ejecutivo de una empresa privada espacial en subirse a su nave para «viajar al espacio».
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El vuelo de su compañía, Virgin Galactic, se robó todos los titulares. Por lo menos hasta que Jeff Bezos y Blue Origin demostraron que ese vuelo suborbital en realidad no fue tan extremo como lo quisieron hacer ver.
Pero eso no habría sido lo peor. Ya que ahora descubrimos que en realidad durante esa misión hubo un falló grande y delicado que ahora ha detonado un bloqueo completo de cualquier vuelo futuro para esta firma por parte de las autoridades.
Virgin Galactic en aprietos por un error serio
Todo empezó con un reporte del New Yorker, en donde el reportero Nicholas Schmidle reveló en exclusiva que durante ese último vuelo con Richard Branson se dispararon unas alarmas en los tableros de control de la nave.
La SpaceShipTwo habría desviado de la nada su trayectoria de descenso para terminar aterrizando en un lugar distinto al que se suponía estaba contemplado.
Como vimos al final no sucedió nada grave, pero una nave que no puede aterrizar con precisión donde sus instrumentos contemplan inicialmente su punto de arribo es un tema grave.
Así que la Administración Federal de Aviación (FAA) habría iniciado una investigación sobre el caso. Prohibiendo a la empresa de Branson realizar más vuelos mientras tanto:
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Virgin Galactic no puede devolver el vehículo SpaceShipTwo a misiones de vuelo hasta que la FAA apruebe el reporte final de investigación del incidente o determine que los problemas relacionados con el incidente no afectarán la seguridad pública.
Así que la compañía espacial está relativamente suspendida. Ya que su única nave está vetada para salir al vuelo en nuevas misiones hasta que no se determinen los riesgos reales que implicó el reporte de fallo.
Virgin responde
Tras la revelación del anuncio de la suspensión el valor de las acciones de la empresa se colapsaron y cayeron un 4%. Por su parte Virgin Galactic asegura en su primera declaración oficial que la prueba de vuelo fue segura:
Aunque la trayectoria final del vuelo se desvió de nuestro plan inicial, fue una ruta de vuelo controlada e intencional que permitió a Unity 22 alcanzar con éxito el espacio y aterrizar de manera segura en nuestro puerto espacial en Nuevo México.
Se afirma que durante la etapa final del vuelo se toparon con vientos de gran altitud que obligó a los pilotos a maniobrar. Lo que detonó todas las alarmas y consecuencias que ahora investiga la FAA.
Parece que este incidente y episodio con la empresa de Richard Branson tiene aún bastantes elementos pendientes.
