El diseño interno del Apple Watch Series 7 estaría dando serios problemas en la línea de producción y ahora está en riesgo su lanzamiento.
En teoría quedan muy pocas semanas o incluso días para que Apple dé por fin a conocer cuál será la fecha de su siguiente evento de presentación par conocer sus nuevos dispositivos.
PUBLICIDAD
El obvio protagonista de esa velada será sin duda el nuevo iPhone 13. Pero hay otros gadgets que esperamos ver en esa conferencia. En especial el Apple Watch Series 7.
Este reloj inteligente ya se ha filtrado de muchas maneras a lo largo de este 2021 y su presentación este mes luce como algo inminente. O al menos eso creíamos hasta ahora.
Por desgracia ahora ha surgido un fuerte y potencialmente verdadero rumor que apunta al posible retraso en el lanzamiento del smartwatch.
Apple Watch Series 7 tiene problemas en las entrañas
Desde dos fuentes distintas llega una misma afirmación. Por un lado tenemos el reporte de Nikkei Asia en donde filtran un reporte provisto por informantes desde la línea de producción.
En donde aseguran que por fuera el reloj de Apple es relativamente similar al modelo previo. Pero por dentro su arquitectura y ensamble es completamente distinto.
Lo que ha detonado múltiples dolores de cabeza ya que se han presentado problemas no previstos al momento de arrancar la producción masiva. Esto ha generado retrasos serios e incluso la compañía habría reducido su volumen de producción meta.
PUBLICIDAD
Más o menos en el mismo tenor Mark Gurman de Bloomberg señala que hay problemas en la fabricación del Apple Watch. A un grado tal que se realizan ajustes en el proceso de ensamble, todo por culpa del nuevo diseño interno.
Ambas fuentes coinciden en que existe un alto grado de probabilidades que todo este embrollo derive en el retraso del lanzamiento y envío del Apple Watch Series 7 a una fecha más tardía a la originalmente planeada.
Al parecer el origen de todos los conflictos residiría en la decisión más visible de su diseño externo: su chasis plano en las laterales que imita a la del iPhone en su generación actual.
Ese cambio milimétrico habría obligado a un reacomodo de muchos componentes, orillando el nuevo diseño interno de su arquitectura. Lo que estaría provocando el problema actual de atascos.