Observar exoplanetas (planetas en otras galaxias diferentes a la nuestra), tiene dos objetivos para los astrónomos a nivel mundial. En primer lugar, conocer si existe, en la inmensidad del universo, otro mundo capaz de sustentar la vida, cómo lo hace nuestra Tierra. Y en segundo lugar, comprender la evolución de los cuerpos rocosos, sus estrellas masivas y la existencia misma en otras regiones.
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De esta manera los científicos han diseñado diferentes instrumentos y los han relacionado para trabajar en misiones conjuntas. Una de estas herramientas es el TESS (Satélite de Sondeo de Exoplanetas en Tránsito), que con su captura de datos, señala a los astrónomos hacia donde apuntar los observatorios terrestres o espaciales.
Entonces, con dicha data en mano, astrónomos europeos hicieron uso del Very Large Telescope del Observatorio Europeo Austral (VLT de ESO) en Chile, para mirar hacia un sistema solar cercano, cósmicamente hablando, a 35 años luz de distancia. Sin embargo, la aproximación no es lo que motiva principalmente al equipo para apuntar sus lentes hacia esta zona. En principio, los autores del estudio creen que la agrupación planetaria podría contar con una atmósfera sustentable.
De hecho, hay una declaración de una de las autoras principales que afirma precisamente esto de la atmósfera sustentable. «El planeta en la zona habitable puede tener una atmósfera que podría proteger y sustentar la vida», dijo María Rosa Zapatero. Esta astrónoma, además de estar entre los firmantes principales del estudio, trabaja para el Centro de Astrobiología de Madrid.
Tres exoplanetas bajo un sistema NO binario
Los científicos han explicado anteriormente lo común que es ver en otras galaxias sistemas solares binarios (dos soles). Y que lo poco común son los que tienen las características del nuestro: una sola estrella masiva.
Por lo tanto, este es otro punto a favor de lo que observa el estudio que publica la página oficial del ESO (Observatorio Europeo Austral). La estrella identificada como L 98-59 está sola y tiene a tres planetas (de los identificados) orbitando sobre ella.
Por ahora no hay instrumentos capaces de medir la atmósfera de un mundo tan lejano. Entonces, las afirmaciones del estudio son de acuerdo a la lejanía que tienen estos tres exoplanetas, en referencia a su estrella anfitriona. Asimismo, que los científicos determinaron que los tres mundos son del estilo rocoso, como lo es también la Tierra o Venus.
«Con la contribución del VLT de ESO, el equipo pudo inferir que tres de los planetas pueden contener agua en sus interiores o atmósferas. Los dos planetas más cercanos a la estrella en el sistema L 98-59 probablemente estén secos, pero pueden tener pequeñas cantidades de agua, mientras que hasta el 30% de la masa del tercer planeta podría ser agua, lo que lo convierte en un mundo oceánico», explicó el portal del observatorio.
