La pandemia global de Coronavirus Covid-19 se vivió con fuerza durante todo 2020. Pero es hasta ahora que las secuelas de esos meses están impactando de lleno a la industria tecnológica.
En buena medida las olas de contagio y las medidas de aislamiento que llevaron a cerrar muchas fábricas dedicadas a la elaboración de chips y componentes alteraron al sector.
Vimos cómo Apple recorrió el año pasado su tradicional calendario de lanzamiento. Mientras que Samsung mandó a la congeladora este 2021 al Galaxy Note, a la par que intenta mantener a flote otros modelos.
Sin embargo, al parecer, esta crisis apenas estaría iniciando y los dos casos referidos serían mínimos comparados con lo que se avecina. Todos los fabricantes de smartphones están en problemas, menos uno…
Apple pone a salvo el iPhone 13
Sucede que la gente de PCMag logró tener acceso a un reporte financiero del sector de hardware y componentes móviles desarrollado por la firma Wave7. En donde básicamente ofrecen una radiografía actual de la situación del mercado de smartphones con relación a la escasez de componentes.
Ahí básicamente el informe asegura que la peor parte de la crisis de escasez de componentes apenas está iniciando. Pero en realidad está impactando a cada compañía de manera distinta.
Samsung y OnePlus serían los más afectados, por problemas de cuellos de botella generados en sus líneas de ensamble. Donde el flujo inconstante de chips está afectando aún más todo.
De igual manera otras firmas con su volumen concentrado en unidades de gama media y baja también están experimentando un proceso complicado. Pero sus modelos de gama alta estarían asegurados en su meta de producción.
Lo curioso aquí es que Apple sería la compañía menos afectada. Al menos para su división dedicada a la fabricación del iPhone. Ya que, como todos sabemos, no podrá cumplir con su demanda de fabricación para la iPad y las MacBooks. Todo debido al procesador M1 y los componentes que exige.
Pero sus smartphones no tendrían problemas de escasez, al menos no con el iPhone 13. Todo debido a que en su momento lograron asegurar y garantizar el volumen de producción calculado para esa generación.
En otras palabras, no sería complicado conseguir el nuevo smartphone de Apple este año. Lo que no sabemos es sí tendrán la misma suerte en 2022.