Se viven días de intenso cambio para los usuarios de Android. Hemos visto durante las últimas semanas una serie de giros inesperados que han generado gran expectativa.
Primero llegó la revelación de Windows 11 con la intención absoluta de integrar por completo el uso de apps nativas para ese sistema operativo móvil. Pero utilizando como puente la tecnología de Intel junto a la tienda virtual de Amazon.
Luego llegó la revelación de que Google mataría el uso del formato APK para las aplicaciones, migrando al más ligero ABB. Lo que representó de inmediato un golpe mortal para los sitios de descargas de aplicaciones de terceros.
Esto obviamente iba a tener repercusiones de todo tipo, incluso legales, por la naturaleza del movimiento. Y ahora es justo lo que está sucediendo.
Google es demandada por medio Estados Unidos
Según se ha filtrado desde XDA Developers un total de treinta y siete fiscales generales de 36 Estados de la nación norteamericana ha presentado una kilométrica demanda contra Google como parte del conglomerado de Alphabet Inc.
Todo bajo el argumento de que la compañía violaría de facto las leyes antimonopolio; al ser los responsables de administrar su tienda de aplicaciones para Android, la Google Play Store y cobrar comisiones de hasta el 30% en apps de paga:
El otro asunto es que esta plataforma, según marca el documento de 144 páginas, concentraría la descarga del 90% de las aplicaciones utilizadas en los dispositivos de este sistema operativo móvil.
Esto por naturaleza es una dinámica que no favorece una competencia equilibrada de mercado. Y se integra a los múltiples procedimientos regulatorios a los que se ha sometido Google durante los últimos meses.
Aunque la resolución de esta mega demanda aún está por conocerse. Ya que no parece haber una solución obvia.