Virgin Galactic, la empresa de turismo espacial financiada por Richard Branson, hizo algo que pocos esperaban que podría lograr: lograr un vuelo tripulado exitoso y surcar fuera de los cielos.
Se trata de un proyecto que tenía demasiado tiempo en desarrollo y donde no faltaron los múltiples momentos de incertidumbre sobre el éxito de esta compañía.
Sin embargo Branson se mantuvo firme y logró el éxito. Convirtiéndose así en la primera persona en viajar al espacio a bordo de una aeronave que él mismo ayudó a financiar.
Sucedió durante la madrugada del domingo 11 de julio de 2021 y con ello superó relativamente a Jeff Bezos y Elon Musk. Ya que ninguno de ellos ha viajado en las naves que han pagado.
El avión espacial supersónico despegó sobre Nuevo México llevando a Branson y tres compañeros de tripulación. Demostró que su proyecto era factible y ahora más quieren vivir la experiencia. Hasta sus competidores…
Elon Musk compra un boleto
Según detalla el propio Branson en entrevista con The Sunday Times, el fundador de SpaceX, Elon Musk, ha adquirido ya un boleto para viajar al espacio utilizando Virgin Galactic.
No se especificó una fecha concreta para el vuelo para ya tendría el ticket reservado. Richard incluso afirmó que Elon es amigo suyo y que probablemente lo acompañe en la nave el día que decida viajar al «espacio».
Y lo ponemos entre comillas porque en sí hay algunos detalles a considerar con la experiencia de vuelo de Virgin Galactic.
En primer lugar no despegan con un cohete desde tierra como las naves de SpaceX o Blue Origin. Por el contrario, cada nave Unity despega de manera horizontal integrado a un avión monumental, que se eleva por encima de los 15 kilómetros.
Es a esta altura que el Unity se separa y empieza su vuelo en arco ascendente. Por ejemplo en el caso de Branson logró una altura final de 85 kilómetros sobre la superficie de la Tierra.
Esa distancia es suficiente para ver la curvatura de nuestro planeta aunque no es tanto como para considerarse completamente en el espacio exterior. Como referencia, la Estación Espacial Internacional (ISS). Esa donde va SpaceX varias veces al año, está a 418 kilómetros sobre nosotros.
Aún así el vuelo de Virgin Galactic resulta histórico en toda regla y abre un nuevo episodio en la historia del turismo espacial.
Será interesante ver la respuesta de Jeff Bezos desde su compañía espacial privada Blue Origin.