Cuando Microsoft presentó Windows 11 nos dejó a todos impresionados con las cualidades y ambiciones de su nueva plataforma de escritorio. Sin embargo, la realidad es que poco se habló en ese evento sobre el hardware necesario para correrlo.
De hecho, de manera discreta y a través de distintos medios, comenzaron a circular algunos datos sobre los requisitos mínimos para poder instalar el sistema operativo.
Ahora se ha publicado por fin la lista oficial. Pero la en sí ha terminado creando un poco de confusión entre los potenciales nuevos consumidores.
Windows 11 es pesado
A través de su blog oficial los amigos de Microsoft actualizaron una herramienta, de nombre PC Health, que ahora es capaz de verificar la compatibilidad de nuestra computadora.
Sin embargo, la confusión se genera al correr el programa ya que luego de su diagnóstico genera usualmente una enredada lista de requerimientos mínimos para poder correr su plataforma dividida sobre soft floor y hard floor:
Esto ha generado confusión entre todos ya que la distinción y detalles sobre algunos de los puntos es confuso. Encima de que no indica qué componentes concretos deberían ser cambiados en la PC.
Pero en rasgos generales y menos confusos, estos son los requerimientos para instalar Windows 11:
- Procesador: compatible con 64-bit, de dos o más núcleos. Con 1GHz o más de velocidad.
- Memoria RAM: 4 GB o más.
- Almacenamiento: 64 GB o más.
- Firmware: UEFI.
- Gráficos: GPU compatible con DirectX 12.
- Monitor: de más de 9 pulgadas con una resolución mínima de 720p.
- Cuenta de Microsoft activa: indispensable.
- TPM 2.0: Módulo de plataforma segura en placa base.
Contando con estos elementos podrá instalarse el sistema operativo. En donde el TPM 2.0 será el principal punto de conflicto.
Ya que computadoras con un par de años de antigüedad es casi un hecho que no lo tendrán en su placa.
Tal vez es hora de ir pensando en comprar una nueva PC si quieren instalar el nuevo sistema operativo de Microsoft.