No hay dudas de que todos queremos regresar a la normalidad. Aproximadamente desde marzo del 2020, en América Latina, llegó el confinamiento producto del coronavirus y desde entonces, al igual que el resto del mundo, no hemos podido volver a cómo era antes. Sin embargo, hay que tener algo bien presente: la nueva normalidad no va a ser la misma que vivimos antes de que nos atacara el virus. La gente ya se acostumbró a trabajar en casa y el regreso tiene que ser diferente. Y para eso se prepara Google, que rediseñará totalmente su sede en la que hasta incluirá paredes robóticas inflables.
Es cierto que las paredes robóticas inflables de Google llaman mucho la atención. No obstante, son solo un apartado de las múltiples ideas que tiene el gigante de Silicon Valley, para la reingeniería de sus locaciones. The Verge, destaca algunos de los aspectos que Google compartió directamente con The New York Times, para informar que, probablemente en septiembre de este año, sus empleados comenzarán a regresar de forma definitiva.
El proceso de vacunación contra el coronavirus ha sido efectivo en los Estados Unidos, por lo que ya en dicho territorio ven la normalidad mucho más cerca que en Latinoamérica. Sin embargo, Google tiene que cambiar varios aspectos de sus políticas de oficinas, debido a que sus empleados, aunque tengan los mismos nombres y números de identificación, ya no son las mismas personas.
Oficinas de Google
Reseñan los portales citados que Google tiene una especie de iniciativa, en la que impulsa la cercanía entre sus trabajadores. Dicen, según los sitios mencionados, que esto incita a la colaboración entre los compañeros. Pero, en la nueva normalidad que se viene, hay un mundo que acaba de vivir una pandemia y al que le sometieron el distanciamiento social como principal herramienta para evitar el contagio. Entonces, de inmediato no se puede colocar a las personas a trabajar lado a lado.
De esta manera Google aprovecha para impulsar sus espacios abiertos y aumentar las distancias entre sus empleados. Y, en caso de que no quiera aumentar las distancias, entonces debería haber una protección mayor. Para esto último dicen que toman en cuenta una posible pandemia futura o la gripe común que se presenta durante una época específica del año.
Paredes robóticas inflables
«Si una reunión requiere privacidad, un robot que se parece a las entrañas de una computadora con ruedas y está equipado con sensores para detectar su entorno se acerca para inflar una pared de globo de celofán translúcido para mantener alejadas las miradas indiscretas», así lo describe The New York Times, en su reseña.
El dispositivo entrega privacidad y evita la distracción en un determinado momento. Después, se podrá regresar al ambiente de trabajo compartido. De igual forma, hay una modalidad para quienes no necesitan un escritorio permanente. En cambio, tienen un lugar estacionario en el que podrán pasar, abrir su sesión y ejecutar la tarea específica. El tope está unido a un sistema que podrá adecuarse de forma electrónica a la altura que la persona sienta más cómoda.
