Elon Musk tiene un nuevo enemigo a vencer. No se trata del espacio exterior, ni de Bill Gates, ni de los cohetes que explotan. No, es ni más ni menos que la administración del Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump y su choque contra Tesla Motors.
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Para nadie es un secreto que este gobierno mantiene una guerra comercial contra China, imponiendo medidas regulatorias tan arbitrarias como controvertidas.
Huawei y TikTok son los casos más famosos de los que la mayoría nos hemos enterado, pero el pleito en realidad llegaría a más niveles y habría impactado a grandes automotrices como Ford, Mercedes-Benz y hasta Tesla Motors.
El problema de los aranceles
Según reportan nuestros amigos de Business Insider, Tesla Motors ha presentado una demanda ante el Tribunal Internacional de Comercio de Nueva York, contra el Gobierno de Donald Trump.
Todo derivado de las tarifas de aranceles que ha impuesto a algunas autopartes de origen chino, calificando las medidas impuestas como «ilegales».
La compañía de Elon Musk considera que estas tarifas aduanales del 25% adicional impuestas por el gobierno de Trump son «arbitrarias, caprichosas y constituyen un abuso de poder».
De manera que las firmas automotrices involucradas, cada una con una demanda por separado, exigen la anulación de la medida así como una compensación con intereses por todo lo que ya han pagado.
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En el caso de Elon Musk y Tesla por ejemplo numerosas piezas de sus coches son importadas de China, entre ellas las pantallas del tablero principal.
Esta situación dispara el costo de producción de cualquier coche Tesla, y si a eso le sumamos que ya perdió miles de millones de dólares con su Battery Day, pues entendemos que Musk exija un cambio.
