Se cumplieron nueve años del lanzamiento de la sonda espacial Juno y la NASA anunció nuevos datos del gigante gaseoso, Júpiter. Esta nave espacial salió un 5 de agosto del 2011 desde la Tierra. Cuatro años y 11 meses después llegó a su destino, para estudiar sus características. Desde entonces revela información sobre los componentes que integran el planeta más grande de nuestro sistema solar.
Recordando la fecha de su noveno cumpleaños, la NASA publicó en sus distintas plataformas nueva información del comportamiento de los cielos. Júpiter es el hogar de un fenómeno al que llaman relámpago superficial. Se trata de una inesperada descarga eléctrica que se origina en las nubes que contienen agua y amoníaco. Entonces este fenómeno se puede comparar con el que ocurre con los rayos de la Tierra. Los cuales para darse, deben contar con nubes con agua.
Los nuevos datos sobre Júpiter
Explican los científicos que anteriormente se pensaba que los rayos en Júpiter eran similares a la Tierra. Es decir que se formaban solo en tormentas donde el agua existe en todas sus fases. «Pero los destellos observados en altitudes demasiado frías para que exista agua líquida pura contaron una historia diferente. Esta ilustración utiliza datos obtenidos por la misión para mostrar cómo son estas tormentas eléctricas a gran altitud», escribieron en las redes sociales.
Además explica una nota publicada en el portal Slash Gear, que los nuevos datos sugieren que estas tormentas eléctricas pueden arrojar cristales de hielo hacia la atmósfera del planeta. Incluso hasta un punto en el que se superan los 25 kilómetros por encima de las nubes. En este punto se encuentran con el vapor del amoníaco que derrite el hielo para así formar una nueva solución del agua, para cumplir el ciclo. Dentro de la zona donde ocurre este evento se alcanzan los -52 grados celsius.