Qué mejor review en período de cuarentena que una TV, y Philips tuvo el acierto de lanzar la campaña para potenciar su nuevo modelo Borderless hace unas semanas.
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La propuesta de valor que hace la marca es la siguiente: un panel 4K UHD de alto diseño con motor Philips Pixel Precise Ultra HD que convierte imágenes comunes en 4K y mejor reproducción de color.
Lo primero que llama la atención es su cuidado diseño, donde lo predominante en el frontal es la impresión futurista de casi no tener bordes, lo que antes estaba reservado a modelos de mayor gama. Es, estéticamente, un agrado a la vista.
El tratamiento de imagen desde la caja no es mi favorito, pero demostró que con pocos ajustes podía lograr lo deseado, con un nivel de brillo y balance que me convencieron en la semana que llevo usándola.
Lo que aún me produce una sensación de dulce y agraz es su sistema operativo Saphi, que por un lado es extremadamente rápido y fácil de usar, pero que siento que tiene algunas omisiones en su tienda de aplicaciones. Para Netflix, YouTube y Amazon Prime, todo perfecto. Aún así, creo que una caja Xiaomi o hasta un Apple TV le vendrían bien, para complementar mejor todo. Se agradece que el control remoto tenga un teclado Qwerty en su posterior. Facilita bastante la vida al buscar contenido.
En un principio pensaba que era 4K, con un HDR bastante decente y ya, pero mi sorpresa llegó al ver que era compatible con Dolby Vision y Dolby Atmos, que son, hoy en día, mis tecnologías favoritas de imagen. Esta TV logra el efecto, no como en las más premium, pero lo hace sorprendentemente bien.
Lo anterior significa que con los ajustes adecuados, el audio no es pésimo como en la mayoría de las teles y me dejó relativamente conforme dentro de su gama.
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En lo que respecta a conectividad, el WiFi y el Bluetooth son súper estables, mientras que sus 3 entradas HDMI, una ARC, se me hicieron suficientes en mi set al menos, con un decodificador y dos consolas. No alegaría por una entrada HDMI más pero está bien ¿USB? Sí, por supuesto.
Su desempeño en videojuejos es sorprendentemente bueno, como viene siendo la tónica con la marca. Su tiempo de respuesta pelea con los modelos más caros. El «modo juego» está bien logrado, incluso con contenido HDR.
Actualmente en el retail la podemos encontrar a un precio menor a los CLP $250.000 (Chile), lo que a mi parecer la hace una súper buena opción y demuestra que se puede tener algo lindo y decorativo sin romper la billetera.
