El proyecto DART (Double Asteroid Redirection Test) es una de las iniciativas más disparatadas de la NASA. Ya que parece sacada directamente de una película de Bruce Willis.
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En donde la agencia espacial buscaría prevenir el fin del mundo estrellando una nave contra un asteroide en curso de colisión contra la Tierra para desviar su trayectoria y salvarnos a todos.
Desde hace un año exactamente SpaceX fue elegida como la empresa que acompañaría a la NASA en este loco loco proyecto. Desde entonces los preparativos han ido avanzando y se acerca cada vez más el momento inevitable de ver la primera prueba en junio de 2021.
Mientras tanto The Planetary Science Journal acaba de publicar una investigación, en donde se revela la franca posibilidad de que este primer intento produzca artificialmente una lluvia de meteoritos tras el impacto de la nave contra unos de los asteroides Didymos.
Según marca el documento, el choque resultante haría explotar material de la superficie del asteroide y, al menos una pequeña cantidad, llegaría lo suficientemente cerca de la Tierra para provocar una lluvia de meteoritos.
Un buen número de las partículas tendrían apenas un centímetro de diámetro, así que la mayoría se quedarían cerca de Didymos por su atracción gravitatoria, mientras que otras partes sí alcanzarían la atmósfera de nuestro planeta.
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La investigación especula igual que parte del material podría presentar un peligro para futuros vehículos espaciales, por su dispersión y movimiento.
Algunos fragmentos, los que llegarían hasta acá, se quemarían al entrar a la atmósfera, generando la distintiva lluvia de luz. Pero sólo habría una manera de comprobarlo dentro de algunos meses.
