Allá afuera está lleno de peligros que pueden comprometer la privacidad de nuestra información. Dentro de toda esa fauna el spyware de Pegasus es uno de los más infames y peligrosos cuyo uso por parte de gobiernos está muy bien documentado en países como México.
Es un riesgo para cualquiera en el planeta, no en vano en 2019 Facebook emprendió un pleito legal con los creadores del software espía, NSO Group.
Todo por utilizar servidores falsos de WhatsApp como parte esencial de su sistema para vulnerar los smartphones de un número desconocido de víctimas.
El punto delicado es que parte de los documentos de la corte han hecho públicos, para descubrir que en realidad Mark Zuckerberg y compañía intentaron comprar a la compañía en 2017.
Facebook buscaba la tecnología spyware de Pegasus con la intención de poder rastrear y perfilar con mayor decisión a los usuarios de la red social con un iPhone o iPad.
Todo conecta con Onavo
La idea original antes de pensar en esa alianza era utilizar VPNs «gratuitas» como Onavo Protect, para que los datos recolectados pudieran ser usados por la red social para determinar mejor las preferencias de los usuarios de dispositivos Apple.
El asunto es que esa ruta de acción no era muy precisa, ni tan robusta, para recolectar lo datos que les interesaban. De modo que se acercaron a NSO Group para poder usar su tecnología.
Según declara el CEO de la compañia del spyware, Shalev Hulio, ellos se negaron, porque Facebook es una entidad privada y no un gobierno, sus supuestos clientes exclusivos de Pegasus.
Esto es mucho más delicado de lo que parece.