Retomamos nuestro recuento semanal de cada episodio de Better Call Saul. Namaste hace una semana nos regaló un capítulo entrañable que prometía una avalancha de angustias y puntos sin retorno. Ahora con Dedicado a Max comprobamos muchas cosas.
Mike amanece luego de la paliza que recibió. Descubre que está en algún lugar de México y es atendido por el mismo médico que conocimos de aquella masacre en Breaking Bad con Gus Fring y el cartel de don Heladio.
Mesa Verde está por iniciar su obra para desalojar al inquilino incómodo. Cuando Saul Goodman llega y aplica una de sus artimañas.
Kim al parecer intenta zafarse del asunto gracias a la jugarreta de su novio, pero no lo logra. Saúl será su contrincante en los tribunales.
Mike intenta comprender por qué Gus lo salvó, se descubre en una comunidad con una fuente dedicada a un tal Max.
Howard llama a Saul, este lo desdeña mientras sigue avanzando con su proyecto. Kim llega a su casa, y ahí descubrimos que todo es parte de un plan más elaborado.
Mike se las arregla para resucitar su teléfono móvil y llama a Gus Fring. Pero no es un buen momento.
A la par Saul Goodman se las arregla para fingir una excavación arqueológica, una potencial zona de riesgo radiactivo y hasta una pared con el rostro de Jesucristo en la casa que se disputa.
Todo se sale de control, Kim habla por la noche con Saul, ella no quiere dar por terminado el asunto y eso eleva el riesgo potencialmente.
Mike recibe una llamada de larga distancia. No es Gus Fring y no está disponible para ayudar a Saul. Kim y Saul reciben a un misterioso Señor X, que no es otro más que Sobchak de la primera temporada.
Están desesperados y Kim prácticamente ya fue descubierta en su bufete jurídico, pero parece que encontraron algo para salir adelante.
Gus por fin visita a Mike. Ahí por fin tienen la discusión que los llevará a volverse aliados en esta guerra contra los Salamanca.
Guiños a Breaking Bad
El doctor Barry Goodman hace su aparición. Tal como pronosticamos hace una semana, el médico que salvó a Gus y al propio Mike en la cuarta temporada de Breaking Bad aquí se muestra nuevamente atendiendo las heridas del gruñón.
¿El nombre de Max les suena familiar pero no recuerdan quién es? La fuente es un homenaje a Max Arciniega, el compañero de Gus Fring que fue asesinado por los Salamanca en Hermanos, el sangriento episodio de la cuarta temporada de Breaking Bad.
Incluso vemos una transición curiosa entre el primer vistazo de la fuente y el cambio al agua teñida de rojo por un té que se prepara Saul. Todo como una evocación del momento de la muerte de Max en la piscina.
Más o menos en esa misma línea vemos un guiño de encuadres con Mike. Cuando se escapa y se queda sentado a medio camino en medio de la nada antes de que llegue el doctor. La postura y la secuencia nos recuerda al último paisaje que vio este personaje antes de morir en Breaking Bad.
Desde ahí ya estaba condenado.