Las pasadas campañas electorales en Estados Unidos que dieron como ganador a Donald Trump nos demostraron que la manipulación de información pude alterar el resultado de las elecciones de un país entero. En ese incidente Facebook y Twitter ocuparon un papel de mucho peso y es hora de prevenir.
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Pareciera por lo menos que esa es la intención de Twitter, ya que acaban de adelantar los nuevos cambios que impondrán en sus políticas de contenidos. Todo de cara al nuevo proceso electoral que se avecina en la nación norteamericana.
Ahora, todo el contenido alterado, manipulado, falso o distorsionado que comience a circular en la plataforma podrá ser etiquetado como tal.
El distintivo no lo eliminaría necesariamente de la red social, pero sí bloquearía su distribución y mostraría que se trata de una publicación alterada en mayor o menor grado para generar una reacción en quien lo vea:
No se podrán compartir engañosamente materiales «sintéticos o manipulados» que puedan causar daño.
Esta regulación abarcará fotografías, imágenes, audio y video, expandiéndose incluso a videos deepfake que muy probablemente serán pieza clave presente para cualquier cantidad de escándalos políticos fabricados.
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Twitter en teoría se encargaría de regular todo y tomaría distintas medias según amerite el caso para marcar, eliminar o bloquear cada publicación engañosa.
Todo apunta a que será algo complicado en cualquier caso.
