Tim Berners-Lee, conocido por ser el creador de Internet, ha señalado recientemente que este corre un serio peligro y que él tendría claro cómo poder arreglarlo.
The New York Times fue el encargado de publicar la reciente entrevista en dónde Berners afirma su postura con las siguientes frases «Yo inventé la World Wide Web y así es cómo podemos arreglarla».
Para esto, el llamativo creador de la web ha creado un tratado internacional con el cual plantea reconstruir la red y hacerla funcionar tal cual la habían pensando hace muchos años sus creadores.
Internet y su creador
En el tratado presentado por Berners ya se han unido compañías cómo Facebook y Google, así como también Gobiernos de diversos países Europeos entre los que destacan Francia y Alemania.
Uno de los puntos más llamativos es en el que se plantea una «coexistencia pacífica» entre ambos gigantes de la actualidad, para lo cual todavía queda mucho camino por recorrer.
Este nuevo «contrato de la web» abarcará, según la propuesta de Berners la cual fue elaborada con el aporte de más de 80 organizaciones más un grupo de ciudadanos encuestados y en la cual participaron entidades pertenecientes a Facebook, Microsoft y algunos Gobiernos de Europa, una reforma de 9 principios con los cuales se busca establecer ciertos parámetros básicos.
Estos serían la transparencia, privacidad, inclusión y el diálogo racional, formas con las cuales se podría llevar al Internet tal como alguna vez fue pensado por sus creadores. Según informaciones este nuevo acuerdo ya cuenta con el respaldo de 160 firmantes, además de 500 organizaciones a las cuales se les unió hace poco Twitter.
Un acuerdo por Internet, lejano
Lo ideal sería que todas las organizaciones se unieran a este nuevo contrato y, en el caso que no cumplan sus principios, serán eliminados inmediatamente. Este acuerdo hace un llamado a los Gobiernos alrededor del mundo a incluir medias como: derecho a la portabilidad de información, registro de datos por parte de las empresas (transparencia con los usuarios), entre otros más.
Un ejemplo utópico de este plan aplicado sería en el que China debería derribar su «cortafuego» y Estados Unidos su actual duopolio, aunque como era de esperarse, ninguno de estos dos países ha firmado.
Entre otra de las cosas destacadas que exige este nuevo contrato está el terminar finalmente con los apagones de la web, algo que en algunos países todavía se sigue practicando. También pide encarecidamente a los gobiernos que termine con la publicidad política segmentada, algo que sin duda pondrá felices a muchos.
