Después de más de una semana de histérico juego, tanto solo como acompañado y online, es hora de hablar de FIFA 20.
Este año, la saga deportiva de EA ofrece un nuevo modo de juego basado en el fútbol callejero (Volta) y otras novedades más que iremos abordando.
Jugabilidad
Primero lo que más importa, porque sin este apartado bien logrado, lo demás vale poco y nada. Cuando probamos el demo tuvimos un pequeño susto de que FIFA se había vuelto más pesado, pero no, es muy, pero muy similar a la entrega pasada.
Al menos eso hasta ahora, porque en lo que respecta a a estos juegos, uno termina de conocerlos en su totalidad como en noviembre, después de todos los cambios que les hacen.
Al final del día las adiciones más importantes en lo que respecta a lo palpable es que los defensas al fin pueden no alcanzar a un jugador rápido, porque antes vivíamos en un mundo donde Javi Martínez podía ganarle una carrera corta a Mbappé, pero en fin, ya no más, a los que son veloces ahora se les nota. Injusto o no, así es la vida.
La pelota se siente algo más pesada y el sistema de dribbling es diferente, porque gracias a la adición del modo callejero (ya hablaremos de eso), las fintas son más variadas, aunque depende del jugador que estés utilizando.
El sistema de tiros libros cambió radicalmente y ahora con el segundo stick puedes hacer un «flick» de cómo quieres que tu jugador le pegue al balón con el pie. A mí parecer le entrega más profundidad a este apartado, pero por otro lado complica algo que antes era bien intuitivo y no requería, a buenas y a primeras, cambiar.
Lo mismo pasa con el sistema de tiros de penales, que a pesar de llevar una media década, mucha gente no los entendía, pero que una vez que asimilabas el cómo, era perfecto. Ahora lo eliminaron y pusieron un modo más «simple», donde es más lógico apuntar hacia dónde va el balón, pero ojo, que igual requiere de práctica para no tirarla a las nubes.
En definitiva y tal como les adelantamos, es el mismo motor y feeling que en FIFA 19. Si te gustaba, este te gustará aún más. Si no te gustaba, te tenemos pésimas noticias.
Gráficos
El apartado gráfico está muy bien logrado, con un motor de colisiones aún menos propenso (aunque no libre) de choques absurdos y unas caras, en donde hay escaneo, que no tienen tanto que envidiar de PES.
De todas formas, lo que mejor logra FIFA en este aspecto es la inmersión, porque los estadios, licenciados o no, están muy bien hechos, con una iluminación exquisita, un tratamiento de desgaste de la cancha y clima muy realistas e hinchadas que cada año están más vivas. Ese es el gran tema y factor diferenciador: el entorno en FIFA responde a los contextos que se van planteando, y eso se siente increíblemente bien.
Esos pequeños detalles hacen tremendas diferencias a la larga y a pesar de no entregar nada realmente nuevo, el tema de las hinchadas, la presión, la atmósfera y demás suman muchísimo a una experiencia que cada vez es más pulcra, incluso con un set de comentarios a pesar de ser casi lo mismo desde 2013 y requerir de un refresco urgente, están muy bien hechos.
Perder licencias como la de la Juventus y que el equipo se llame «Piemonte Calcio» es aburrido. No creo que sea una buena estrategia para PES esto de comprar exclusivas, su problema no es solo de licencias y no creo que nadie se cambie solo por eso.
Nuevos y viejos modos
Lo más importante y destacable de este año es el modo Volta, que es una suerte de sucesor espiritual de FIFA Street, pero que al jugarlo te das cuenta que no tienen nada que ver.
La jugabilidad aquí es exquisita y groseramente entretenida, con factores gráficos y de jugabilidad que tratamos anteriormente y que portaron muy bien a este «mini modo».
Volta tiene hasta un modo historia, lo cual se agradece muchísimo para darle más personalidad, aunque la trama en sí es bastante repetida y lógica. En fin, no vine buscando tramas complejas y vueltas de tuerca en un FIFA, pero podrían tener mejores guionistas, sin duda.
La parte compleja empieza en otros lados, ya que FUT es un carnaval interminable de microtransacciones y un mundo en el que no queremos meternos. Sabemos que es entretenido y que le significa el grueso de las ganancias a EA, pero de verdad no gustamos de casinos en juegos de fútbol. Lo otro es que el modo carrera y en general los modos offline se sienten muy abandonados. Como DT puedes dar ruedas de prensa y con eso influir en el ánimo de tu equipo, lo que se vuelve un poco repetitivo, pero al menos es algo.
Lo grave empieza cuando te das cuenta que el modo carrera está roto, que los equipos importantes juegan con juveniles o jugadores tercera opción, que jugando la Premier lo normal es que el Wolverhampton salga campeón, mientras el City y el Liverpool se van a segunda (por dar ejemplos insólitos de cosas que están pasando). EA dice que ya está trabajando en un parche para esto, pero que tardará ¿De verdad nadie probó este modo de juego antes de lanzarlo?
¿Quién gana este año, FIFA o PES?
A pesar de pecar de ser un juego muy parecido al anterior y de tener partes simplemente rotas, como el modo carrera, la adición de novedosos modos como Volta, que podrían ser una entrega por sí sola y una inmersión bien lograda en general, FIFA es el ganador este año.
Ahora, no por mucho si PES sigue creciendo al ritmo frenético que lo viene haciendo, FIFA tendrá que hacer cambios más drásticos, pero por ahora pueden quedarse tranquilos, pueden ganar con poco, los saltos dados hace 3-4 años fueron muy fuertes.
