Aún sigue vive el recuerdo de la experiencia que resultó el irregular e inverosímil final de Game of Thrones. Conforme más pasa el tiempo más se consolida el consenso de que la última temporada no estuvo a la altura de la saga. Los responsables absolutos de ello fueron David Benioff y D.B. Weiss; los mismos que se supone harían una trilogía de Star Wars.
Tras ver el resultado del desenlace de la serie de HBO los fans restantes de La Guerra de las Galaxias se movilizaron y empezaron a publicar peticiones en línea para exigir su salida del proyecto.
A Disney no parecía importarle mucho, hasta que se estrenó Solo: A Star Wars Story y se observó la caída en picada de las ventas de productos. Desde entonces se guardó un silencio sepulcral sobre esta dupla hasta ahora, que han abandonado esta trilogía.
Según relata The Hollywood Reporter y las propias declaraciones de ambos, hay una razón muy formal para su salida; y se concentra en el trato exclusivo que David Benioff y D.B. Weiss firmaron con Netflix:
No hay suficientes horas en el día y sentimos que no podíamos hacer justicia tanto a Star Wars como a nuestros proyectos de Netflix.
Sin embargo basta con analizar brevemente algunos antecedentes para comenzar a sospechar que ese pretexto fue mero protocolo.
La película de ellos dos, que daba arranque a la nueva trilogía posterior a la saga Skywalker, debía estrenarse en el año 2020. Arrancando su producción justo luego de la película de Han Solo.
Pero todo fue congelado, Benioff y Weiss, al igual que Rian Johnson dejaron de hablar de sus proyectos. Al parecer por orden del estudio.
Y ahora, en cuanto Kevin Feige tomó las riendas de Star Wars, junto con las de Marvel, demostrando que el día sí tiene suficientes horas. Su primer acto bajo su dirección fue prácticamente sacarlos del proyecto.