Aprovechando que estuvimos en el lanzamiento del Mate 30 en Alemania, Huawei nos llevó a conocer los cuarteles centrales de Leica.
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Esta casa alemana, responsable de la fabricación de icónicas cámaras fotográficas y que hoy representa una suerte de estilo y receta en el mundo audiovisual, tiene sus oficinas en Wetzlar, a unos 40 minutos al norte de la súper industrial Fráncfort.
Es un pueblo pequeño, de edificios muy bajos y mucho campo, donde el paisaje se interrumpe con estas moles color cemento al natural redondas. El edificio principal es un lente mirado desde arriba.
La arquitectura de las oficinas está llena de referencias, como la anterior y como el museo y tienda del lugar, que es rectangular como una cámara y con un visor en la esquina, que es un balcón.
Los entendidos en fotografía saben de la importancia de Leica en la historia, y es por eso mismo que tienen en exposición sus modelos más icónicos, además de escritorios de ingenieros que se pueden ver y más.
El lazo con Huawei
La historia entre esta respetada marca alemana y Huawei comenzó recién en 2016, cuando se lanzó el P9 con cámaras en co ingeniería con Leica. Ese fue un punto de inflexión muy poderoso para el fabricante oriental, ya que los germanos no se irían con cualquiera.
Huawei ha podido posicionarse como uno de los fabricantes de móviles más grandes del mundo, y probablemente si no fuera por el veto de Estados Unidos, ya estarían peleando mano a mano con Samsung el primer lugar.
De momento el tema está en «veremos», pero el apoyo de Leica sigue latente y ellos declararon estar orgullosos de seguir trabajando con Huawei, con o sin la «aprobación» de Estados Unidos.