Un estudio de alto impacto sobre la vacunación y sus efectos publicó la Escuela de Graduados de Salud Pública de la Universidad de Pittsburgh. En concreto se trata de los problemas que habría si es que dejamos de inmunizar a la población.
Basicamente lo que arroja la investigación es que si la vacunación disminuye en un 5%, las posibilidades de aumentar las tasas de sarampión suben a un 4.000% más.
El autor principal David Sinclair, Ph.D., investigador postdoctoral en el Laboratorio de Dinámica de Salud Pública, comentó los alcances médicos de esta publicación.
«Con las tasas de vacunación actuales, hay una posibilidad significativa de un brote que involucra a más de 400 personas en este momento en algunas ciudades de Texas. Pronosticamos que una reducción continua en las tasas de vacunación aumentaría exponencialmente los posibles tamaños de brotes», sostuvo.
Vacunación en duda por motivos religiosos
Más de un 64% de los niños en el Estado de Texas no se vacunan por motivos religiosos y 36% no lo hacen por afecciones médicas que se complicarían por su vacunación.
“Cuando alguien se niega a ser vacunado, está tomando una decisión que no solo los impacta. Están aumentando el riesgo de que las personas que no son inmunes, por causas ajenas a su voluntad, se enfermen gravemente y posiblemente mueran «, dijo el autor principal Mark Roberts, MD, MPP , profesor y presidente del Departamento de Política de Salud de Pitt Public Health y Gerente y director del Laboratorio de Dinámica de Salud Pública de Pitt.
Una de las estadísticas más graves es que si la vacunación en las escuelas cae en un cinco por ciento, «el tamaño de los posibles brotes de sarampión aumenta exponencialmente en cada área metropolitana, con Dallas-Fort Worth, Austin y Houston todos susceptibles a brotes de 500 a 1,000 personas».
Una nueva evidencia grande contra los anti-vacunas, que tienen muy preocupadas a las autoridades en Estados Unidos.